Extienden el plazo en el pleito de la Junta contra bonistas

 

CLARIDAD

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Para el licenciado Rolando Emmanuelli Jiménez, el hecho de que la jueza Laura Taylor Swain, le concediera un mes adicional de mediación a la Junta de Control Fiscal (JCF) y los bonistas acreedores que exigen el pago en su totalidad de la duda de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE), indica al menos que no hay un tranque definitivo.

La jueza Swain, quien atiende el caso de la quiebra del gobierno de Puerto Rico, mediante la ley impuesta por el Congreso de Estados Unidos, llamada ley Promesa, concedió hasta el 8 de octubre para que las partes continúen en la mediación. A preguntas de este medio Emmanuelli Jiménez, quien es el representante legal del Sistema de Retiro de los trabajadores de la UTIER, uno de los entes a los cuales le debe la AEE, señaló que no hay información sobre la sustancia de la mediación ya que son confidenciales y los mediadores han dejado fuera de esta a todos los otros grupos que no son bonistas. Aunque indicó que hay una pista de que se han reunido con mucha intensidad porque la ex jueza Shelley Chapman, quien fue designada como mediadora por la jueza Swain, radicó una moción indicando que dedicó alrededor de 50 horas en agosto al proceso de mediación.

El experto en la ley Promesa y casos de quiebra, dijo que no le sorprende el que a este momento no hayan llegado a un acuerdo, pero el que hayan pedido extensión implica que hay algún tipo de expectativa de un acuerdo, ya en otros momentos los mediadores han dicho que hay tranque, por lo que de haber un tranque definitivo lo hubiesen informado.

No obstante, Emmanuelli Jiménez, advirtió que es importante tener el contexto para no tener falsas esperanzas en ese proceso de mediación el que la JCF le ofreció a los bonistas disidentes hasta $2.600 millones y los expertos de la JCF dijeron que eso era lo máximo que Puerto Rico podía pagar. En caso de pretender tener que pagar más dijeron que la economía de Puerto Rico se iba “escocotar”, venir abajo. Por parte de los bonistas -comentó Emmanuelli Jiménez- tienen la expectativa de que hay más dinero en juego por lo que cualquier acuerdo al que la JCF llegue moviéndose en la dirección que piden los bonistas de pagar mas dinero es malo para Puerto Rico.

El margen para la insistencia de los bonistas de que se puede pagar más surge del hecho de que el Tribunal de Primer Circuito de Apelaciones les permitió cuestionar la contabilidad de la JCF y además los bonistas radicaron una moción diciendo que Luma, la empresa privada a cargo de la transmisión y distribución (T&D) de la energía hizo una estimación de ingresos mas optimista. Aun cuando hay mas dinero -atajó- hay unas necesidades de mantenimiento en el sistema que hay que atender y se supone que los bonistas cobren de lo que sobre.

 

Se supone que el 8 de octubre las partes informen a la la jueza el estatus de la mediación, que se extiende hasta el 31 de octubre. Emmanuelli Jiménez, reconoció que a los bonistas les conviene negociar porque siempre cualquier acuerdo significara mas dinero, pero va a llegar el momento en que digan ‘hasta aquí llegamos’. Trajo a la atención el que la quiebra de la AEE se radicó en julio del 2017, por lo que ya van siete años de litigio.

La apreciación de Emmanuelli Jiménez, sobre la actitud de Swain de mover la mediación es con el propósito de posponer el tener que tomar decisiones difíciles como seria la desestimación de la quiebra. En caso de una desestimación-explicó- cada acreedor puede ir por su lado en sus gestiones para cobrar, pero los bonistas también tendrían el remedio de ir al tribunal a pedir que se nombre un sindico. En todo caso-añadió que un sindico no es fácil y podría ser caótico, aunque el “trust agreement” y el tramite que se tiene que seguir le da cierto orden al proceso.

El licenciado Emmanuelli Jiménez, coincidió en la observación de que se está en la misma incertidumbre que en el verano cuando la jueza ordenó la mediación. Observó que la JCF no puede cambiar ahora su posición de que no se puede pagar más, eso haría quedar mal a sus expertos, ya que gran parte de la litigación se concentró en la discusión de cuánto dinero hay disponible para cubrir las operaciones y cuánto dinero hay para pagar a los acreedores y eso lo determina cuánta energía puede producir la AEE y cuánta energía puede comprar la población.

En caso de que la jueza vuelva a extender la mediación hay oportunidad de llegar a un acuerdo, sino tiene que empezar a ver las mociones, lo que tanto para ella como para el país, expresó el experto sería bien difícil.

Los pagos que se supone haga la AEE se depositan en unas cuentas bajo el control de un banco en Nueva York. A siete años de negociaciones Emmanuelli Jiménez, auguró que el proceso continuará todavía hasta el 2025…

 

Ni enmendables, ni supervisables

A pregunta de CLARIDAD respecto a la postura del gobernador de que los contratos de privatización de la AEE, de Genera PR y LUMA Energy, no se pueden prescindir, Emmanuelli Jiménez, señaló que la postura del gobernador tradicional es la de defender a LUMAy Genera que “no responden a la necesidad que tiene el pueblo de Puerto Rico, esos contratos no son ni enmendables, ni supervisables”. Puntualizó que aun cuando se quiera supervisar los contratos no dan facultad para meterse en los detalles operacionales, para lo único que dan facultad los contratos es para ver si se está cumpliendo o no, pero el gobierno no tiene ninguna facultad para intervenir en las operaciones de LUMA y Genera, ni siquiera el director ejecutivo de la AEE puede hacerlo.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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