Entrevista a Litzy Alvarado Antonetty
CLARIDAD
Ella, candidata a la alcaldía del Pueblo del mojo isleño; él, candidato a senador por el Distrito de Guayama, ambos por el Partido Independentista Puertorriqueño (PIP). Los esposos Litzy Alvarado Antonetty y Víctor Alvarado Guzmán reconocen que es algo complejo el que cada uno de ellos sea candidato a un puesto electivo. Pero eso no impide el que asuman lo que consideran su responsabilidad en este momento histórico.
“Es complejo, pero entiendo, como dice Víctor, que es algo que debemos asumir como cristianos. También entendemos que la familia es importante. Tratamos de hacer balance y sacar tiempo para lo que tenemos que hacer. Por ejemplo, tengo el compromiso semanal de cantar una misa en la Parroquia del Coquí, los sábados. No descuidamos esos aspectos que nos han dado tanto y que nos han ido formando también. Así que siempre sacamos tiempo para todo lo que es importante para nosotros”.
Es media mañana de un día claro, todavía no hace mucho calor en la plaza pública de Salinas, en la cual entrevistamos primero a Alvarado Antonetty. Esta es la segunda vez en que es candidata por el PIP a la alcaldía de Salinas. Ya lo fue en las elecciones del 2020. Sobre el momento actual, en el plano nacional considera que, distinto a la campaña pasada, en la presente hay un contexto histórico distinto. “Hay una concienciación nueva con relación a nuestra realidad como pueblo. La gente está más consciente de lo que está pasando a nivel político, de cuánto los políticos en los que confiaban los defraudan una y otra vez, y eso se está dando incluso en la gente de mayor edad”.
La también madre de un adolescente de 15 años rechazó la idea de los que piensan que esa gente del corazón del rollo no va a cambiar y afirma que se “está dando ese despertar de la gente, de que ya es tiempo de hacer las cosas distintas y mejor”.
La candidata del PIP señaló que a nivel municipal, de las elecciones para acá, se ha dado una decepción general en el pueblo de Salinas en cuanto a la ejecutoria de la incumbente. “Así que todo eso va sentando las bases para que uno pueda decir —no me gusta usarlo, pero— te lo dije. Vamos con mucho entusiasmo”.
De hecho, narró que el día de las elecciones pasadas, en que estaban esperando los resultados en la casa porque no tenían comité de campaña, aunque no salió victoriosa, al ver los resultados, sí sentó precedente al ser la candidata del PIP en Salinas que más votos ha sacado, y con una propuesta de una plancha legislativa integrada solo por mujeres. “Víctor no hacía más que llorar y llorar de la emoción y satisfacción. Sentí que lo que había que hacer se cumplió y se llevó el mensaje a la gente de que hay gente con deseos de servir, gente que tiene un historial de servicio, de integridad, que quiere servir al pueblo”.
La pasada campaña la corrió en tiempos de pandemia mientras daba terapias virtuales y hacía trabajo de comunidad. Alvarado Antonetty es terapista ocupacional hace ya casi 25 años. “Lo digo y no lo creo”. Tiene una maestría en Educación con concentración en autismo, lo que nos provoca preguntar por su parecer sobre la gestión del Departamento de Educación en los servicios a los estudiantes de Educación Especial. Comparte que ha trabajo con el DE subcontratada por corporaciones y que es lamentable la escasez de servicios. Aun cuando dijo que considera que ha mejorado algo, de todos modos sigue la necesidad y la carencia de servicios. “Los terapeutas en este país hacen mucho con muy poco”, afirmó.
Más allá de las muchas situaciones ambientales que enfrenta el pueblo de Salinas, una de las preocupaciones de la candidata es que Salinas es uno de los pueblos con mayor incidencia de cáncer. “Yo soy sobreviviente de cáncer hace casi 12 años. Como profesional de la salud es algo que me preocupa, es algo que tiene mucho peso en mi campaña. Queremos tratar de encontrar la forma de identificar esos factores que están detonando esa situación, es importante que las personas sean educadas en lo que es salud. Para eso he diseñado un programa bastante específico de comunidades sostenibles”.
Agregó que es importante atender a la población vieja para que tengan opciones de salud preventiva, como la prevención de caídas y del “combo boricua” de diabetes, presión alta y colesterol. Otra situación que mencionó le preocupa es la cantidad de niños con diversidad funcional. El programa municipal del PIP para Salinas atiende estos aspectos, por lo que quisiera llegar a la alcaldía para ponerlo en función. No obstante, expresó que, de no llegar, si la persona que sí alcance la alcaldía está dispuesta, ella a su vez está en disposición de sentarse y compartirlo.
En términos de desarrollo económico indicó que, si bien como pueblo costero hay cosas que se pueden hacer que no se están haciendo, el desarrollo no puede ser a costa de las comunidades. No siempre los residentes están contentos con ese desarrollo, ya que el país entero va allí a vacacionar, a comer los fines de semana, afectando la calidad de vida. Eso ha llevado a que muchos residentes hayan optado por irse.
“No podemos imponer el desarrollo y el turismo en Salinas por encima de la necesidad de los residentes de esas comunidades. Pronto tendremos una comunidad de playa sin residentes”, advirtió. Algo que destacó es que ya se han comenzado a ver letreros de ventas de casas relacionados a los interesados en la llamada Ley 22 (ahora Ley 60).
“Siempre he dicho que las soluciones tienen que salir de la comunidad. Un incumbente no puede imponer opciones. Mi línea siempre ha sido sentarme con la comunidad y atender las líneas de acción”.
En la actualidad, Litzy Alvarado Guzmán trabaja en un hospital privado de rehabilitación física para adultos en Ponce donde es la supervisora del Depto. de Terapia Ocupacional. Excepto por la actual alcaldesa, miembro del Partido Popular, todavía no se sabe quiénes serán sus otros contrincantes.
La candidata del PIP, nacida y criada en Salinas y de padres salinenses, expresa con orgullo ser producto de la escuela pública, de la UPR Río Piedras y del Recinto de Ciencias Médicas. Apuesta a su experiencia, al conocimiento, a las ganas. “Mi tiempo como legisladora municipal fue muy bueno, mucha experiencia ganada”.
