La actividad, celebrada todos los años, fue dedicada al pueblo de Palestina
CLARIDAD
Hace siglo y medio, en 1868, el país intentó liberarse de las fuerzas coloniales españolas al declarar, desde Lares, la República de Puerto Rico. Poco después de aquel 23 de septiembre, los colonos retomaron el pueblo a la fuerza y suprimieron cualquier intento subversivo. De ahí, la fecha pasó como cualquier otra hasta que, a principios del siglo pasado, Pedro Albizu Campos rescató la conmemoración de los mártires de ese día. De forma simbólica, el abogado sembró un árbol de tamarindo en el que, desde entonces, se inicia el acto solemne. Este año, los cadetes del Partido Nacionalista de Puerto Rico (PNPR) inciaron la ceremonia con el intercambio de las banderas de Puerto Rico y Lares.
“La formación de una política borincana es una tarea cargada. Creo que existe la formación de una sociedad con una dirección diferente a la que nos han dirigido. Primero comienza reconociéndonos como puertorriqueños, recordando que no somos gringos que hablan español, pero latinoamericanos del Caribe. Segundo, reconociendo las complicaciones socioeconómicas que enfrenta nuestro pueblo a diario. No podemos mantener un paraíso fiscal que se presta para el empobrecimiento de los puertorriqueños”, expresó la portavoz del PNPR.
Tras las expresiones, las personas que rodeaban el árbol alzaron el puño en solidaridad, mientras el himno de Lares y La Borinqueña sonaban en toda la plaza pública. Al culminar, los cadetes depositaron una ofrenda floral cerca de la tarja del árbol, donde la organización Se Acabaron Las Promesas ofreció un mensaje.
“Vamos al desmantelamiento de nuestra universidad pública, vamos a la carencia en nuestras escuelas, y en cada una de esas cosas de nuestra cotidianidad está la mano del imperialismo yanqui. Por eso es indispensable, en este momento histórico, sacar a esa basura de nuestra tierra”, criticó Joselyn Velázquez, de la colectividad política.
Del mismo modo, Velázquez catalogó a la Junta de Control Fiscal (JCF) como “hija” del imperialismo y la actora principal a favor de la privatización de la energía eléctrica, la universidad y otros servicios esenciales del país. También, la activista recordó el asesinato del compatriota Filiberto Ojeda Ríos, un 23 de septiembre de 2005.
Por otro lado, Gerardo Lugo Segarra, del PNPR, reiteró la postura antielectoral del organismo revolucionario. Argumentó que, en estos tiempos, la independencia es más importante que nunca para resolver “los problemas que nos aquejan como pueblo”. Igualmente, denunció que esa solución no yace en las “farsa electoral” porque, en su diseño, estos procesos solo perpetúan la condición colonial del país.
“Compiten, en ellas, los partidos coloniales motivados por obtener puestos de sirvientes del imperio. Para este espectáculo cuentan con un generoso auspicio del llamado presupuesto electoral, que corrompe a toda la sociedad. Las alianzas y los acuerdos van y vienen, pero nada resuelve. Washington es el que decide”, manifestó el líder nacionalista.
Después del mensaje de Lugo Segarra, la candidata para el Precinto 4 de San Juan por el Partido Independentista Puertorriqueño (PIP) y la Alianza, Adriana Gutiérrez Colón, se dirigió a las personas con un tono esperanzado. La licenciada mencionó las posibilidades de triunfo del candidato a la gobernación Juan Dalmau Ramírez y recordó el historial democrático del PIP de escoger “el camino menos doloroso”, en palabras de Gilberto Concepción de Gracia.
“Es esa dedicación, esa constancia, ese nunca rendirse lo que nos ha permitido que hoy, ante una circunstancia tan distinta a las que habíamos conocido, estemos listos y listas para ser parte de un gran proyecto político: la Alianza. Circunstancia que nos permite decir, no como una aspiración, no como un deseo, sino con gran confianza, que el candidato del PIP y de la Alianza, Juan Dalmau Ramírez, está en el umbral de ser gobernador de Puerto Rico”, declaró la también secretaria de Asuntos de Mujer y Género del PIP.
Tras el mensaje, el profesor Julio Muriente aludió a la primera oración del Manifiesto Comunista, de Marx y Lenin. En tono de broma, el también candidato del Movimiento Victoria Ciudadana (MVC) dijo que “el fantasma del comunismo recorre Europa”.
“¿Qué partido de oposición no ha sido desacreditado como comunista por sus adversarios, dueños del poder? 176 años después, como sacado de la manga y porque no se les ocurre otra cosa, ha resurgido en Puerto Rico el fantasma del miedo al comunismo”, aseveró Muriente.
El profesor en Geología aseguró que estas acusaciones responden al miedo de los dos partidos principales, particularmente por las movidas políticas que se han dado entre el PIP y el MVC, cosa que catalogó como inimaginable para quienes se enajenan de las problemáticas de Puerto Rico.
Además de los oradores, algunas de las figuras destacadas en la actividad fueron: María de Lourdes Santiago, Rosa Seguí, Denis Márquez, Rafael Bernabe, Adrián González Costa y Mariana Nogales Molinelli. En la tribuna de la actividad, la mirada patriota de Heriberto Marín atalayaba los actos conmemorativos.
Reconocimiento de Palestina
Sonia Santiago, de la organización Madres Contra la Guerra, recalcó el genocidio que vive Palestina, particularmente desde octubre del año pasado cuando Hamas y las fuerzas represivas de Israel lanzaron sendos ataques.
“El respeto a la libre determinación y soberanía en Palestina son los mismos reclamos que hacemos los boricuas. Porque si a Palestina le han robado tierras, a nosotros también nos han robado tierras. Si en Palestina los movieron de lado a lado para que pusieran el Estado sionista ideal”, denunció la portavoz de la organización.
Del mismo modo, Santiago recordó a los más de 55,000 mártires en Palestina, de los que resaltó 18,715 niños y niñas, 11,000 mujeres, 147 periodistas y 1.7 millones de desplazados.
Al terminar la actividad, el vozarrón de Choco Orta deleitó a todos los presentes que, año tras año, prestan su presencia para recordar el Grito de hace siglo y medio.