En aumento las personas sin hogar

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Las personas no viven en las calles porque quieren. El consumo de alcohol, el desempleo, las consecuencias de los desastres naturales u ocasionados por el hombre y los  problemas de salud mental, son las primeras cinco razones por las que haya personas que se encuentran sin hogar. Ahora, por primera vez, se dio un aumento de la cantidad de adultos mayores que viven en las calles en Puerto Rico.

Esto es así según los resultados del Conteo de Personas sin hogar 2024 en Puerto Rico, presentado recientemente a la Prensa por las  organizaciones CoC PR- 502 y CoC PR-503, (Centros  de Cuidado Continuos), los cuales ofrecen servicio a personas sin hogar.  En la presentación participaron la presidenta del CoC PR 502, Belinda Hill, y la presidenta del CoC PR-503,Yesenia Mójica Figueroa. Es la primera ocasión en que ambos centros presentan los resultados de sus respectivos censos en conjunto. El CoC-502 atiende alrededor de 24 municipios del norte centro y el Coc-503 atiende 54 municipios que incluyen el sur, el este, el  oeste  y las islas municipios Vieques y Culebras.

El conteo no constituye un censo de la población que enfrenta el sin hogarismo, el conteo es de  individuos y familias que en el periodo del conteo eran o no albergadas, sin una residencia nocturna primaria, o  personas albergadas, es decir, que viven en un albergue supervisado, operado por una entidad pública o privada, designado para proporcionar vivienda temporera, se explicó.

El análisis de los resultados del conteo fue presentado por Anitza Cox, directora de Análisis y Política Social, de la firma Estudios Técnicos (ET Inc.) De entrada, expuso que era importante partir del marco general social económico de Puerto Rico, ya que se ve a través de la presentación de la población de personas sin hogar cómo se interceptan muchos de los problemas que atravesamos como país.

En esa línea, repasó que estamos pasando por un proceso acelerado de envejecimiento de la población por varios factores. Por un lado, una tasa de nacimiento que se ha reducido en un 56 % desde el 2010, altas tasas migratorias, un 37 % de la población compuesta por personas de 55 años o más y una reducción de población de 13 % desde el censo de población del 2010. Por otro lado, un país con una población más pequeña,  una economía más pequeña y  una recesión desde el 2006. A todo lo anterior se suma el que una de cada cinco personas padece de una condición de salud o incapacidad y el 29 %, básicamente, cuatro de cada diez de las familias vive bajo el nivel de pobreza y tenemos uno de los índices de desigualdad más altos a nivel global, por lo que cada vez se hace más ancha la brecha entre la clase media.Así las cosas, el conteo arrojó que 2,096 personas se encontraban sin hogar en el 2024, una cantidad menor en comparación con el conteo del 2022.

Entre los datos más sobresalientes se destacan que en el 2024 un 55.4 % de las personas estaban enfrentando el sinhogarismo por primera vez (en comparación con 51% en el 2022). Las razones mayores de estar en la calle por primera vez son consumo de drogas (41.9%), problemas familiares (34.3%), problemas financieros (16.9%), desempleo (15.9%) y problemas de salud mental (14.1%). Un 68% de las personas sin hogar no estaban albergadas y un 73% de estas presenta alguna condición de vulnerabilidad, como consumo de alcohol o drogas, condición de salud mental o impedimento físico.

Resalta, además, que el 10.5 % de las personas sin hogar atravesaba una situación de violencia de género/ doméstica o de pareja, agresión sexual, acoso, o violencia en cita. Esta cifra representa un aumento en comparación con el 2022, que fue 9.5 % de las personas sin hogar.

En cuanto a la demografía de las personas sin hogar, el análisis reflejó que un 67 % de las personas fluctúa entre las edades de 25 a 64 años, y un 14.1 % de las personas son mayores de 65 años.

Sobre los adultos mayores de 65 años sobresale el hecho de que casi la mitad, un 49.8 % de estos, enfrenta el sinhogarismo por primera vez y el 69.1 % presentó alguna vulnerabilidad como consumo de alcohol,  38.7 % condición de salud mental y alguna incapacidad o impedimento (21.2%). En el conteo se identificaron 296 adultos mayores, de los cuales el 84.7% no estaban albergados.

Del  total de personas sin hogar, un 78.3 % son hombres y un 25.8 % son mujeres y un 75.3 % reportó estar en situaciones de vulnerabilidad, tales como adicción a drogas o alcohol, problemas de salud mental o tener una discapacidad o impedimento físico.

En cuanto a las mujeres sin hogar, el  número asciende  a 541, de las cuales un 68.1 % no estaban  albergadas, 61 % estaban enfrentando el sinhogarismo por primera vez y cinco de cada diez mujeres enfrentaban el hogarismo con hijos menores de 18 años.

Otro grupo para destacar es el de los jóvenes de 18 a 24 años, que representó un 2.6 % de la población sin hogar, de los cuales un 69 % enfrenta el sinhogarismo por primera vez. Las razones principales de estos jóvenes para estar sin hogar son problemas familiares (40 %), el uso de drogas y alcohol (33.3 %) y situaciones de violencia de género (30 %).

Mientras, el 21.7 % de las personas sin hogar estaban en una situación crónica, lo que quiere decir que presentaba una situación de incapacidad, que han deambulado de manera continua por un año o más.

Se identificaron 25 pueblos con la mayor concentración de personas sin hogar. De los primeros cinco encabeza  la lista el municipio de San Juan, seguido por Ponce, Caguas, Bayamón,  y Vieques.  Los de menor número son; Fajardo, Isabela, Manatí y Río Grande.

Este conteo se lleva a cabo cada dos años como parte de los requisitos del Departamento de la Vivienda y Desarrollo Urbano de EE. UU. (HUD) para obtener datos no duplicados sobre el número de personas sin hogar, sus características y necesidades. En esta tarea participaron más de 600 voluntarios a través de toda la Isla para poder identificar a las personas sin hogar.

Belinda Hill, presidenta del CoC PR-502, señaló que “el conteo es la herramienta más poderosa que tenemos para establecer los planes a seguir en las organizaciones que atendemos el sinhogarismo. Al evaluar la evidencia que nos proveen las tendencias y las necesidades de las personas sin hogar, expresadas por ellos mismos, podemos así reenfocar nuestros esfuerzos hacia nuestra misión de lograr que nadie duerma en la calle”.

Por su parte, Yesenia Mojica Figueroa, presidenta de la Junta de Directores del CoC PR-503 y Coordinadora Moriviví apuntó: “Uno de los principales retos que enfrentamos en el CoC PR-503 es el mito que el sinhogarismo es un fenómeno urbano. Esto lleva a la concentración de fondos y recursos en San Juan y el área metropolitana extendida, dejando vacíos de servicios en el resto del archipiélago. El sinhogarismo rural puede que no sea tan visible, pero es real. Tenemos que crear conciencia de las necesidades de vivienda y servicios en las áreas rurales. Por esto, esfuerzos como el del Conteo son importantes y necesarios. Necesitamos datos certeros que reflejen la realidad del sinhogarismo en Puerto Rico y que sirvan para informar nuestras estrategias, soluciones y formulación de política pública”.

 

 

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