La historia marginada por el oficialismo:  El trabajo cinematográfico de Ava DuVernay

 

Por María Cristina/En Rojo

Netflix me ha brindado la oportunidad de ver dos excelentes filmes de Ava DuVernay (quien fue parte del jurado del Festival de Cannes donde asistí en 2018) que son producciones originales y de fácil acceso a todos sus suscriptores ($10 mensuales). Aunque mejor conocida por Selma (2014) y A Wrinkle in Time (2018), su trabajo en el documental 13th (2016) y la miniserie “When They See Us” (2019) es sencillamente vibrante, brillante y transformativo.

13th

(directora: Ava DuVernay; guionistas: Spencer Averick y Ava DuVernay; cinematógrafos: Hans Charles y Kira Kelly)

La enmienda # 13 de la Constitución de los Estados Unidos de América a la que se refiere el título lee: “Neither slavery nor involuntary servitude, except as a punishment for crime whereof the party shall have been duly convicted, shall exist within the United States, or any place subject to their jurisdiction/Ni en los Estados Unidos ni en ningún lugar sujeto a su jurisdicción habrá esclavitud ni trabajo forzado, excepto como castigo de un delito del que el responsable haya quedado debidamente convicto.” (aprobado por el Congreso en diciembre 6, 1865). El documental trazará los caminos seguidos por esos esclavos ahora liberados y su descendencia en un país y, especialmente región sureña, que nunca aceptó la igualdad de los seres humanos y la abolición de un sistema bestial que le trajo tanta riqueza.

Así seguimos los malos gobiernos centrales de la Reconstrucción del Sur después de la Guerra Civil, los abusos de los carpetbaggers (especuladores y oportunistas del norte), una economía sin mano de obra y el resentimiento ante cada factor que había causado su ruina. ¿Cómo volver a conseguir trabajadores a los que no tenían que pagar? Utilizan la cláusula dentro de la Enmienda 13 para asegurar que no altere la división del pasado: encarcelar a los negros sureños (y los del Norte que se atrevían a proclamarse libres e iguales como Emmett Till asesinado en 1955 a los 14 años) por cualquier infracción fabricada por los que seguían imponiendo sus leyes: “except as a punishment for crime whereof the party shall have been duly convicted/ excepto como castigo de un delito del que el responsable haya quedado debidamente convicto”. De ahí en adelante, las cárceles y los campos de trabajo se llenan de, en su inmensa mayoría, hombres negros de todas las edades. 

Este es precisamente el hilo que sigue DuVernay para darnos la relación económica, política, racial y cultural de la encarcelación masiva de afroamericanos y el desarrollo del complejo industrial carcelario a través de los diferentes presidentes estadounidenses, comenzando con Richard Nixon y resaltando a Ronald Reagan y Bill Clinton. Sus entrevistados van de un conservador derechista como Newt Gingrich a expertos en el sistema carcelario y cómo ha crecido esta población hasta convertirse en más de 2,300,000 hace cuatro años con una mayoría de más del 75% de afroamericanos. Y sabemos la dificultad de los que cumplen cárcel de poder integrarse a la sociedad con un empleo que le provea las necesidades básicas de comida y vivienda.

Como estudiosa del cine, DuVernay desde el comienzo incluye escenas de la gran producción de 1915 de D.W. Griffith, The Birth of a Nation (basado en el libro de 1905 de Thomas Dixon, The Clansman: An Historical Romance of the Ku Klux Klan) que perpetúa la imagen del hombre negro como agresor y violador de mujeres blancas. Esas imágenes quedarán en el inconsciente de esa población blanca sureña en busca de cualquier cuento que justifique la pérdida de la guerra y el cambio económico de la región.

“When They See Us” (4 episodios)

(directora: Ava DuVernay; guionistas: Ava DuVernay, Julian Breece, Robin Swicord, Attica Locke, Michael Starrbury; cinematógrafo: Bradford Young; elenco: Asante Blackk, Caleel Harris, Ethan Herisse, Marquis Rodriguez [adolescentes], Jharrel Jerome, Jovan Adepo, Chris Chalk, Justin Cunningham, Freddy Miyares [adultos], Marsha Stephanie Blake, Kylie Bunbury, Niecy Nash, Suzanne Douglas, Aunjanue Ellis [las madres], John Leguizamo, Michael Kenneth Williams [los padres], Felicity Huffman, Len Cariou, Vera Farmiga, Famke Janssen, Storm Reid, William Sadler, Jayce Bartok, Frank Pando, Reece Noi)

En entrevista con la revista Time (2017), Du Vernay describe su labor artística como política:

“I feel like all art is political. As artists, we’re sharing our point of view, asserting our identity through our work, whether you’re making a romantic comedy or you’re making a documentary about prison. For artists who are seeing the work as art and not as work for hire, it’s saying something about how they feel. All of the work that I’ve done in film and television, even the commercial work, the images that I try to craft are saying something about me. That won’t change.” 

Su serie de Netflix, “When They See Us” logra precisamente lo que se propuso: utilizar la realidad de un caso policíaco y judicial para exponer de manera clara, directa y dramática el discrimen y prejuicio que arropa a la población afroamericana en los Estados Unidos desde sus inicios. El caso de 1989 de los cinco adolescentes acusados de golpear, violar y dejar casi por muerta a una mujer blanca que corría/trotaba en el Parque Central de Nueva York es revivido en todos sus detalles para enlazarlo, en las mentes de los espectadores, con todos los asesinatos a manos de la policía que han ocurrido a través de los años y su intensificación durante la presidencia de Barack Obama y ahora con Trump. 

En la narrativa de la historia los cinco chicos—Kevin Richardson, Antron McCray, Yusef Salaam, Korey Wise y Raymond Santana—son producto de su medio ambiente: viven en Harlem en comunidades empobrecidas, las madres y dos de los padres tratan de obtener y mantener sus empleos a pesar del bajo salario e inseguridad de conservarlo, se mueven en lugares repletos de drogas y gangas. A pesar de esto, asisten a la escuela, aunque con muchas ausencias, no piensan en un futuro diferente a lo que les rodea y se divierten en juegos peligrosos. Por eso cuando un grupo numeroso de jóvenes, en su mayoría negros y algunos latinos, deciden internarse en el Parque Central y hacer “wilding” (actuar salvajemente al hostigar a cualquier hombre y mujer que estuviera en su camino), estos cinco chicos—que con la excepción de dos de ellos, no se conocían—se unen sin pensarlo dos veces. Como bien lo recoge el filme A Most Violent Year (J.C. Chandor 2014), la década de 1980 fue uno de los tiempos más violentos en criminalidad en esta ciudad. La incapacidad de la policía de detener la violencia contra los residentes en su hogar, trabajo, calles, transporte privado y público, lugares neutrales como un parque y vecindarios de todos los niveles sociales, resultó en la elección de Rudy Giuliani en 1994 con su promesa de devolver la ley y el orden a la ciudad. Es esta tensión la que la policía, los detectives, la fiscal a cargo de la unidad de crímenes sexuales y la fiscal principal que llevó el caso explotan para conseguir casi de inmediato después de los hechos, arrestos, interrogatorios, confesiones grabadas y firmadas, juicio y convicciones de pena máxima. Cuatro de ellos por tener 14 y 15 años pasaron años en Reformatorios juveniles y Korey Wise por tener 16 fue juzgado como adulto y sufrió los ataques, palizas y violaciones más atroces durante los casi doce años que estuvo encarcelado. Irónicamente Wise es el único que no estaba en el parque. 

No es hasta el 2002, cuando Matías Reyes (siento decir que es puertorriqueño nacido aquí) confiesa que también es el autor del crimen cometido en Central Park en 1989. Solo entonces Richardson, McCray, Salaam, Santana y Wise son exonerados de un crimen que no cometieron. Ni los detectives ni las fiscales fueron acusadas de agravio. Pero sí hubo una demanda en 2003 contra la ciudad por $41 millones por haberle arruinado la vida a estos ahora hombres adultos y se pagó en 2014, gracias a la administración de Bill de Blasio ya que la policía se había negado anteriormente.

Anterior a 13th y “When They See Us”, en 2012, Ken Burns (conocido por la serie de la guerra de Vietnam), Sarah Burns y David McMahon dirigieron el documental The Central Park Five con diversas entrevistas. Con estas tres filmaciones tenemos un cuadro desolador, pero con los detalles necesarios para emitir juicio y estar alerta a los abusos que se siguen perpetrando contra poblaciones marginadas en los Estados Unidos.

Artículo anteriorBolívar y el Bolivarianismo
Artículo siguienteLa surreal realidad de un levantamiento popular