Por la Independencia

Cada día que vivimos, la situación colonial de Puerto Rico se manifiesta contundentemente en diversas actuaciones del gobierno y la terrible Junta de Control Fiscal. Esta última -en su capítulo más reciente de prepotencia imperial- arremetió nuevamente contra la Universidad de Puerto Rico, con un propósito a todas luces ideológico de menoscabar e incluso destruir la institución de formación intelectual y crítica de nuestra juventud, que es también el centro de cuestionamiento y disidencia social más importante del país. En este nuevo capítulo de esta masacre educativa y social, es el mandato de la Junta, la eliminación de las exenciones a la matrícula y los aumentos a la matrícula graduada, la reducción de personal, la congelación de plazas vacantes, la eliminación del bono de navidad y la rebaja de la aportación al plan médico de los empleados. Como si fuera poco, sugieren además, que se reduzca el número de estudiantes a ser admitidos en el futuro previsible en la UPR, para que de esa forma se requieran menos profesores. En otras palabras, la Junta para cumplir su labor de agente de cobros de los bonistas, está dispuesta a reducir la cantidad de estudiantes que el sistema acepte y convertir en un simple negocio, la administración de la universidad.

Como hemos expresado anteriormente, dichas imposiciones promoverán la aceleración de la ya preocupante emigración de la clase trabajadora y productiva, en busca de mejores oportunidades y rehuyendo a estas medidas “que retrotraen nuestro mercado laboral a los tiempos de la esclavitud”. Además, otra de las exigencias de la Junta, consiste en cambiar el sistema de retiro de la Universidad a uno de contribución definida, junto a la reducción de las pensiones, como ya lo ha propuesto para los demás sistemas de retiro del gobierno. A esto le sumamos, los constantes actos negligentes del gobierno en el manejo de las instituciones públicas y sus políticas neoliberales que empobrecen a la clase trabajadora y destruyen avances sociales.

Ante esta realidad nuestra repuesta tiene que ser mayor constancia, perseverancia y optimismo en las tareas y trabajos para adelantar la Independencia, que no es otra cosa que “la nueva caja de herramientas para reconstruir este país”, como nos ha señalado el compañero economista Francisco Catalá. La independencia es la única solución real, para combatir la Junta de Control Fiscal, mediante la eliminación del estatus que permite su imposición, en lo que constituye el más claro y burdo ejercicio de colonialismo.

Es por todo lo anterior que el PIP, a través de su presidente, Rubén Berríos Martínez, hace unos meses emplazó a los presidentes del PNP y el PPD para emprender una iniciativa política conjunta, a nombre del pueblo de Puerto Rico, para exigir del Presidente y el Congreso, tanto la eliminación de la Junta de Supervisión Fiscal, como el inicio de un proceso de descolonización que le permita a los puertorriqueños ejercer su derecho a la libre determinación entre alternativas no coloniales, ni territoriales. Esta propuesta incluye la celebración de una consulta al pueblo para avalar las dos exigencias antes expresadas, así como un requerimiento de que dentro de un término no mayor de un año -a partir de la votación- se inicie el proceso de descolonización de Puerto Rico, que resuelva el problema de estatus político de una vez. Para viabilizar la consulta, se realizaron múltiples reuniones y comunicaciones entre el presidente del PIP y los presidentes del PNP y PPD. Desafortunadamente, el gobernador –cuya reacción inicial fue positiva con respecto a los objetivos generales de la consulta- no nombró a  su delegado para el comité de trabajo propuesto.

Ante la inacción del gobernador, radicamos  en la Cámara y en el Senado proyectos de ley para estimular el más amplio debate en el país sobre nuestra propuesta y con la esperanza de que las voces dentro del PPD y el PNP, que tengan un genuino compromiso contra la Junta y el régimen colonial que la permite, tengan un foro para impulsar sus reclamos. El proyecto dispone la consulta al pueblo de Puerto Rico, el mismo día de las elecciones del 3 de noviembre de 2020, para que pueda darse la expresión contundente de nuestro pueblo, exigiendo el fin de la Junta y el comienzo de un proceso de descolonización.

Pero los esfuerzos del Partido Independentista, para adelantar la independencia de nuestra isla, no terminan ahí. En el ámbito educativo y de concientizar sobre nuestra realidad colonial, y promover la independencia, es con mucho entusiasmo que apoyamos el proyecto “Radio Independencia”, fundado y mantenido por los jóvenes pipiolos Andrés González y Adriana Gutiérrez. Radio Independencia es un espacio o “podcast” de discusión de ideas y propuestas de diversa índole, como ellos expresan “desde el independentismo boricua”.

De igual forma en las redes sociales tenemos nuestro más reciente proyecto “Lo que debes saber sobre la independencia “, con vídeos, cápsulas informativas, entrevistas y conferencias en “vivo” sobre diversidad de temas y aspectos de nuestra lucha y sobre el futuro de Puerto Rico bajo la Independencia con el propósito de llevarle a miles de personas esta información, como lo hicimos en cuatrienio pasado visitando alrededor de 300,000 hogares alrededor de la isla entregando un folleto con el mismo nombre que contesta diversas interrogantes económicas y políticas sobre la independencia.

Tenemos que continuar aunando esfuerzos, desde diversos campos de lucha. Desde la legislatura fiscalizamos, denunciamos y legislamos para el cambio social y para adelantar la independencia. La situación en nuestro país es difícil y complicada, tenemos que renovar energías y aunar esfuerzos para continuar difundiendo nuestro mensaje. Por ello, este próximo domingo 23 de septiembre iremos a Lares, a conmemorar 150 años de esta gesta patriótica y reafirmar nuestra lucha por la libertad. Vamos a Lares, como todos los años, para rendirle tributo a los que dieron su vida por la lucha, vamos a Lares por la Independencia.

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