Desde profesores hasta legisladores, múltiples sectores del país repudiaron la propuesta reciente
CLARIDAD
A solo 11 días de haber emitido una medida que detendría el ingreso de estudiantes para 64 programas académicos de la Universidad de Puerto Rico (UPR), el presidente de la institución, Luis A. Ferrao Delgado, revirtió su decisión tras días de reuniones y protestas en todo el sistema universitario. Con la excepción del Recinto de Ciencias Médicas (RCM), todos los recintos habrían sufrido bajas en su oferta.
“En vista de las tendencias observadas en los intereses que solicitan admisión al sistema de la Universidad de Puerto Rico, las cuales han resultado en una disminución constante en el número de solicitantes a ciertos programas académicos durante los últimos siete años… se establece(n)… detener la aceptación de estudiantes para el año académico 2025-2026”, reza el comunicado del presidente.
A diez días del comunicado, publicado el 23 de enero, el estudiantado del recinto de Río Piedras organizó un pleno en el discutió la inviabilidad que, a largo plazo, representaría el cierre de estos cursos. En el caso particular de la Iupi, esta moratoria habría impactado 15 programas, entre los que se destacan: Literatura Comparada, Filosofía, Historia, Arte, Estudios Hispánicos, Educación Especial y otros más.
“Están diciendo que la gente no quiere estudiar Historia, que no quiere estudiar Inglés, Estudios Hispánicos, Educación Especial, nada de Ciencias Agrícolas. Básicamente no quieren el desarrollo verdadero de un país… la educación es algo fundamental para el bienestar de un pueblo y para la toma de decisiones del futuro”, acotó la representante estudiantil Cali Torres Pérez.
Para Raquel Martínez, presidenta del Consejo de Humanidades (CE) de la Iupi, el jefe del sistema universitario “dijo muchos disparates a la prensa” luego del diálogo con los consejos que se dio en la Administración Central. De hecho, la estudiante recordó que, durante la reunión, los líderes concejales exigieron que Ferrao “redactara esa carta mejor”.
“Primero, presenta varios errores de computación. Una de las estrategias que, por lo menos desde Historia hemos exhortado a otros colegas a emprender, es la medición de estudiantes totales en los programas. El programa de Historia, en el seriado, figura con ocho estudiantes que ha recibido, y atiende a 70 estudiantes a nivel subgraduado, más cerca de otros 70 estudiantes a nivel graduado”, expresó, por su parte, el profesor de Historia Marcelo Luzzi.
Asimismo, el docente aprovechó su turno durante el pleno para resaltar que, si esa matrícula se suma a la cifra total que estudia en la facultad, “se multiplica enormemente”. De acuerdo con el Dashboard de matrícula total y a tiempo completo, la Facultad de Humanidades contaba, en agosto del 2024, con 129 estudiantes en sus programas de Historia. Es decir, la cifra aún no ha considerado los traslados internos ni los cambios de este segundo semestre
“Tenemos que dar una discusión que exceda los números, (pero) también hay que hablar desde los números porque parece que es lo único que (Ferrao) entiende. Es importante revertir el discurso sobre los números que se están dando. Estamos atendiendo a muchos más estudiantes… y podríamos comprobar que todos los programas de la Facultad de Humanidades son autosustentables”, aseguró Luzzi.
“¿En qué sentido?”, agregó, “en el sentido de que lo que ustedes (el estudiantado) pagan por matrícula, que un curso vale $465 ahora mismo, multiplicado por el número de estudiantes por clase, da el salario de un profesor a tiempo completo”, informó el profesor en un breve ejercicio matemático. Además, expuso que la cantidad promedio de esa suma- $12,000- “excede con creces” los $2,000 que ingresa un docente a tiempo parcial.
Luzzi concluyó su turno argumentando que una universidad pública, que se entienda como pública, “no puede permitirse” la eliminación de programas de Historia o Filosofía por la responsabilidad que tiene la institución con el país.
Una movida que puede costarle la renuncia a Ferrao
Aparte del rechazo a la propuesta, que habría tomado efecto a partir del 31 de enero de este año, múltiples sectores de la comunidad universitaria condenaron el estilo de gobernanza de Ferrao Delgado que, desde el 2022, ha amenazado la calidad educativa de la UPR, según varias fuentes. El esfuerzo multisectorial sostuvo una conferencia en el Recinto Universitario de Mayagüez (RUM) para manifestar su rechazo.
De acuerdo con María del Mar Rosa Rodríguez, presidenta de la Asociación Puertorriqueña de Profesores Universitarios (APPU), la administración universitaria ha fallado en hacer propuestas concretas para garantizar que la Junta de Control Fiscal (JCF) conceda los fondos recurrentes que necesita la institución.
“La Junta de Control Fiscal dice que la administración universitaria no le ha demostrado que necesita los fondos. Yo creo que ellos están un poquito ciegos porque, con ver los edificios de todo el sistema de la UPR, se sabe que necesitamos los fondos, pero ellos (la administración) tampoco hacen la gestión. Así que nuestra invitación es que queremos ver esas propuestas que hace la administración de la UPR a la Junta de Control Fiscal, y que le diga no a la Junta de Control Fiscal”, postuló Rosa Rodríguez.
Con esos pasos, añadió la presidenta, la comunidad universitaria y la administración podrían hacerle un frente común a las imposiciones del ente fiscal. De hecho, el panel denunció la falta de fiscalización por parte de la presidencia de la UPR y que, a pesar de esa falta de datos, decide precarizar la condición del primer centro docente del país.
“Nuestros trabajadores, que somos el apoyo a la docencia, el apoyo al mantenimiento de nuestros recintos, estamos todavía cobrando por debajo del (salario mínimo) $10.50, tenemos nuestro convenio colectivo detenido, y todo lo que puede provocar el cierre de estos programas pone el riesgo a los trabajadores”, planteó Carlos de León, presidente de la Hermandad de Empleados Exentos No Docentes (HEEND). También, advirtió que esta determinación podría dar paso al cierre de recintos, como el de Utuado.
Sobre este último punto, De León coincidió con el representante estudiantil de la unidad utuadeña Sebastián Segarra. En entrevista telefónica con CLARIDAD, el estudiante de Agricultura Sustentable, uno de los programas que se habría eliminado, opinó que Ferrao Delgado se encontraba “en un mal momento” en el que “actuó con mala fe” respecto al futuro institucional.
“Cuando se trata de cierre de estos programas, estamos hablando de cinco en UPR Utuado: Agricultura Sustentable, el grado asociado en Procesos de Alimentos, el grado asociado en Horticultura, el grado asociado en Producción Agrícola y el grado asociado en Humanidades. De esas cinco, cuatro son del Departamento de Tecnología Agrícola. En ese departamento reside el 50% de nuestros matriculados”, reveló Segarra, quien también presidió el consejo estudiantil del recinto.
Por igual, el estudiante de la unidad utuadeña enfatizó en que Ferrao Delgado, al emitir esta orden, no consultó a la Junta de Gobierno (JG) de la institución ni a la Junta Universitaria (JU). Incluso, otros representantes del sector estudiantil aducen que el comunicado del presidente fue filtrado, no remitido para enterar a la comunidad universitaria.
“Ha sido nada más y nada menos que un abuso flagrante de la confianza de la UPR”, concluyó Segarra.
El resultado del cierre: una colonia más dependiente
En un país invadido y ocupado hace más de 100 años, donde se importa el 85% de los alimentos, esta medida propuesta por Ferrao Delgado habría socavado la poca soberanía alimentaria que se trabaja en Puerto Rico, de acuerdo con el estudiante de Horticultura Eliudes Camps Marcano.
“El horticultor se enfoca en varias cosas, como la creación de semillas de nuevas plantas para que se puedan producir esos alimentos en el país. Eliminar un bachillerato como este sería, básicamente, poner en riesgo la soberanía alimentaria del país. Así de sencillo, porque son los que ayudan a producir la comida”, alertó Camps Marcano.
Del mismo modo, el estudiante-horticultor subrayó que el recinto mayagüezano es la única universidad Land Grant en Puerto Rico. Este tipo de institución, que existe en otros lugares de Estados Unidos (EE UU), incluye: una facultad, una extensión y estaciones experimentales agrícolas. Esa estructura, según Camps, también se vería en jaque por la consolidación que, a partir de la orden, se ha rumoreado en el RUM.
“Unir esos programas no es ideal, porque cada uno tiene un propósito diferente… si los mezclas todos, tienes la mitad de uno y la mitad de otro, pero no estás creando profesionales en esas áreas particulares. Es como reducir los empleados de una compañía de 10 a cinco y después pones esos cinco a hacer el trabajo de los 10”, esbozó el estudiante.
Camps Marcano ingresó al RUM por ingeniería, pero con el tiempo se trasladó a Horticultura porque le interesó más. El cierre propuesto- y retirado- por Ferrao Delgado no contempló este tipo de matrícula.
Reuniones y manifestaciones
Diversos representantes del país han expresado su rechazo a la medida revertida de Ferrao Delgado, como la Juventud (J) del Movimiento Victoria Ciudadana (MVC), la delegación del Partido Independentista Puertorriqueño (PIP) en la legislatura, el Sindicato de Trabajadores de la UPR (STUPR), todos los consejos de la UPR y más de 15 organizaciones suscritas al frente común.
“ Exigimos que se admitan a todos los estudiantes de nuevo ingreso en estos 64 programas. Docentes, estudiantes y trabajadores cerraremos fila y demostraremos nuestra oposición a esta directriz con el inicio de una Jornada en defensa de la UPR, llamada “Sin U no hay PR, Sin universidad no hay Puerto Rico”, expresó la presidenta del consejo estudiantil del RUM, Marlon Villamil, en un comunicado oficial del 24 de enero.
La jornada incluirá: una manifestación el miércoles, 29 de enero, frente a los portones de la Iupi a las 10 a.m.; asambleas multisectoriales con los 11 recintos el próximo 30 de enero; y un evento cultural que se anunciará más adelante. Mientras tanto, varias fuentes anónimas y cercanas al consejo de Río Piedras piensan que, en la reunión del miércoles, los cuerpos regentes de la UPR exigirán la renuncia de Ferrao Delgado.