Poesía de Eddie S. Ortiz-González

 

 

Apago las luces del auto

 

Apago las luces del auto
mientras transito
por un punto específico
del trayecto
hacia mi lugar de trabajo

La carretera
es de dos carriles.
Por mi derecha, la isla
hace borde con el mar

Durante unos segundos
voy como los dioses
que en su huída nos dejan
en un desamparo absoluto.

Cada vez más lejos
cruzo espacio y tiempo
en medio de la noche.

 

 

Arquímedes de Siracusa. c. 212, AC

Arquímedes
interrumpe al soldado:
no iré donde Marcellus.

Mi labor
aún no termina.

El soldado
desenvaina la espada.

No dañes mis círculos.
Sobre la mesa las esferas,
los planos
con anotaciones matemáticas
al margen,
los implementos de medición.

Todos regados
con la sangre
de Arquímedes.

 

 

 

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