Breves anteriores a Star Wars

Como sucedió hace dos años se estrenaron todos los súper filmes antes de mediados de diciembre porque una vez llegara Star Wars: The Force Awakens a los teatros iba a acaparar la taquilla de diciembre y enero. Pues esta vez Star Wars: The Last Jedi llegó el jueves a Puerto Rico y el viernes 15 es su estreno en los Estados Unidos. Así que mientras hacen reservaciones y fila para el más reciente capítulo de la saga que comenzó en 1977, comento lo que queda al margen para que tengan opciones tanto en salas de cine como en otras localidades.

Thank You for Your Service

(director y guionista: Jason Hall; autor: David Finkel; cinematógrafo: Roman Vasyanov; elenco: Miles Teller, Joe Cole, Beulah Koale, Haley Bennett, Keisha Castle-Hughes, Amy Schumer, Brad Beyer, Hunter Burke, Omar J. Dorsey, Scott Haze)

Puede que los avances de este filme convencieran al público que era otra historia más de soldados regresando de Afganistán con heridas o traumas que logran superar gracias a su patriotismo y esfuerzo individual. American Sniper (2014) de Clint Eastwood comenzó a desviar el tema patriótico y finales “feel good” y anteriormente el filme independiente Stop-Loss de Kimberly Peirce de 2008 lo llevó a otro nivel de antibelicismo y crítica de esta guerra en particular. Thank You for Your Service tiene aspectos de ambos filmes pero su crítica se concentra en los pocos y defectuosos servicios que ofrece la Administración de Asuntos de Veteranos a esos hombres, jóvenes y maduros, que regresan de una guerra no declarada en un territorio todavía desconocido para el ejército invasor: léase los Estados Unidos.

Tres camaradas —amigos por haber servido en la misma unidad y haber sobrevivido— regresan a su “hogar” para reconectar con su vida anterior a su estadía de 15 meses en Afganistán (hoy en día podría ser Yemen, Mali y otros lugares donde EEUU envía sus tropas para “misiones especiales”). Los tres, Adam, Billy y Solo, sufren de trastorno de estrés postraumático (PTSD) aunque ellos no lo entiendan así. Adam parece ser el más exitoso en adaptarse porque tiene esposa (Saskia) y dos hijos pequeños (uno que acaba de conocer) aunque sabemos que perdió su casa al no poder pagarla y ahora vive en un lugar más pequeño; Billy es el más apasionado para volver con su novia y su hijo (no de Billy) y poder casarse pero el haberla provisto de un apartamento durante su ausencia no es suficiente para llenar ese vacío; Solo, quien es de Samoa, tiene esposa que calladamente sabe su estado mental e intenta convencerlo de que no le conviene alistarse nuevamente. Ir de oficina en oficina, hacer largas filas, esperar meses y a veces hasta más de un año para que los evalúen y le puedan ofrecer servicios médicos es en lo que se convierte su presente.

Wonder

(director: Stephen Chbosky; guionistas: Stephen Chbosky, Steve Conrad, Jack Thorne; autor R.J. Palacio; cinematógrafo: Don Burgess; elenco: Jacob Tremblay, Owen Wilson, Izabela Vidovic, Julia Roberts, Mandy Patinkin, Noah Jupe, Bryce Gheisar, Elle McKinnon, Daveed Diggs, Millie Davis, Danielle Rose Russell, Nadji Jeter)

Con un marco estilizado de Hollywood, Auggie Pullman narra su historia de transición entre ser educado en casa e integrarse a escuela media a los 10 años. Esa protección que su madre creyó esencial y que le dio un sentido de seguridad es amenazada casi desde el primer momento en que Auggie entra a su nueva escuela y se encara —literalmente ya que su cara exhibe una serie de cicatrices— a sus compañeros de grado. Si difícil es integrarse a una nueva escuela como estudiante que no conoce a nadie, más lo es cuando sobresale por sus diferencias faciales. La hipocresía, el bullying y el aislamiento son muy difíciles de enfrentar a diario aunque esté más que preparado para sobresalir en sus cursos. En este caso Auggie tiene un staff de maestros y principal (Mandy Patinkin como siempre excepcional en cualquier papel no importa lo breve que sea) que lo apoyan, unos padres que lo aman abiertamente y le dan el sentido de seguridad que necesita para desarrollarse en su propia normalidad y una hermana mayor que aunque muchas veces se siente rezagada por la atención que sus padres le prestan a Auggie, lo ama inmensamente. Este cuadro nos recuerda a otro filme e historia de Stephen Chbosky: The Perks of Being a Wallflower de 2012.

Roman J. Israel, Esq.

(director: y guionista Dan Gilroy; cinematógrafo: Robert Elswit; elenco: Denzel Washington, Colin Farrell, Carmen Ejogo, Lynda Gravatt, Amanda Warren, Hugo Armstrong, Sam Gilroy, Tony Plana, DeRon Horton, Amari Cheatom, Elisa Perry)

Sorpresivamente este extraño y doloroso filme protagonizado por Denzel Washington duró tres semanas en cartelera. Digo esto porque es una historia no placentera de un abogado negro con una ética ya olvidada en esta profesión que tiene que remirar su vida cuando su socio muere y el bufete cierra por falta de solvencia. ¿Cómo puede este hombre sobrevivir en la flexibilidad legal de acuerdos fuera de corte y clientes influyentes sin respeto a las leyes que incluyen tipos como Trump y sus amistades, jefes de gangas y la jerarquía del narcotráfico? Por eso Roman Israel entrará en conflicto al momento en que tiene que enfrentar un juez, un fiscal o un colega que no sigue los criterios que él cree sagrados.

Roman tiene tres experiencias que lo hacen mirar el camino recorrido y tomar decisiones que van en contra de sus principios. El primero, es la dificultad de encontrar una posición como abogado dentro de firmas establecidas. El segundo, es un diálogo que se torna ofensivo entre él, de la vieja guardia del movimiento de los derechos civiles ( como el congresista  John Lewis), y los jóvenes que creen en confrontación directa sin distinciones de género y clase (blacklivesmatter#). El tercero: se basa en observación: acuerdos acomodaticios entre abogados y fiscales que en nada benefician a los acusados que no cuentan con grandes cantidades de dinero. Un robo y crimen, dos acusados, una recompensa por la comunidad albana, desacuerdos y filtraciones de información transformarán, por un tiempo corto, el comportamiento de Roman J. Israel, Esq.

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