La actividad dio fecha en el natalicio del abogado
CLARIDAD
El 2 de diciembre de 1927, Juan Mari Brás llegó al mundo para dejar un legado indeleble en la memoria nacional. Casi un siglo después, en los predios del semanario que ideó junto a César Andreu Iglesias, la Fundación Juan Mari Brás (FJMB) y el Periódico CLARIDAD presentaron el libro La libertad de los despojados: discursos de Juan Mari Brás, en honor al “primer ciudadano puertorriqueño”.
El evento fue mediado por Mari Mari Narváez, hija del fenecido patriota, y contó con la participación de los licenciados Wilma Reverón y Francisco Santiago Cintrón. Para el contenido del libro, Mari Narváez le confió la investigación al historiador Ángel Pérez, quien se ha dedicado a estudiar los documentos registrados del Partido Socialista Puertorriqueño (PSP), Juan Mari Brás y otros temas de “la nueva lucha por la independencia de Puerto Rico”.
“Él [Pérez] nos dio los discursos que aparecían en las carpetas, transcritos por la Policía de Puerto Rico en aquellos años que perseguían a mi padre por cuanto sitio se metía a “predicar la palabra”. Ellos iban transcribiendo y, por suerte, esos discursos ahora están disponibles al público”, ironizó Mari Narváez, también directora de la organización Kilómetro 0.
Entre Pérez, Mari Narváez y Perla Franco, los textos íntegros de la Policía fueron editados en la versión que, el pasado lunes, se anunció bajo la carpa roja de CLARIDAD. Además, Mari Narváez reveló que la FJMB planifica publicar, al menos, dos libros más relacionados con discursos posteriores.
Para discutir en detalle los temas del libro, la FJMB invitó al activista y abogado sindical Francisco Santiago Cintrón, conocido por sus posturas independentistas y contribuciones a la lucha estudiantil y emancipadora. Actualmente dirige Crítica: Cuaderno de discusión política. También el panel incluyó a la abogada Wilma Reverón, reconocida por su desempeño como delegada puertorriqueña en la Organización de las Naciones Unidas (ONU), presidenta del Movimiento Independentista Nacional Hostosiano (MINH) y, a partir de la presentación del libro, presidenta de la Junta Directiva de la FJMB.
Un libro profético sobre el independentismo
“Juan destila un entusiasmo y convicción a prueba de todo, que parte de eventos internacionales que lo reafirman en sus ideales políticos y que lo convencen de la inevitabilidad del triunfo de nuestra lucha libertaria”, opinó Reverón respecto al libro, que recoge discursos desde 1960 hasta 1962.
Enmarcado en el contexto de una recién victoriosa Revolución cubana, estos textos de Mari Brás nacieron poco después de que el abogado fundara, el 11 de enero de 1959, el Movimiento Pro Independencia (MPI).
“Ese movimiento revolucionario que se forja en la manigua cubana, es un movimiento hondamente nacionalista. En aquel momento, no se planteaba el socialismo como modelo económico ni el gobierno por un partido de la clase trabajadora. La fundación del MPI, ese 11 de enero, resulta un movimiento hermano y compatible con la Revolución cubana”, acotó.
La nueva presidenta de la FJMB recordó que el MPI, luego de las décadas tumultuosas que le precedieron, recogió “la bandera de los caídos del Partido Nacionalista”. Nutridas por los postulados del nacionalismo, las alocuciones de Mari Brás que plasma el libro están fuertemente influenciadas por las ideas de Pedro Albizu Campos, Ramón Emeterio Betances y José Martí. Como ejemplo, Reverón citó del libro:
Este movimiento tiene la solidaridad de toda esa América. No estamos solos en la lucha. No somos el grupo aislado que una vez fue el patriotismo puertorriqueño, abandonado por el resto del mundo. Hoy tenemos las fuerzas jóvenes. Hoy tenemos esas fuerzas de Lázaro Cárdenas en México, la de Salvador, la de Chile, la de Emérito Villalba en Venezuela. Esas fuerzas que dirigen la opinión pública de América están con nosotros…
“Esa fe inquebrantable en el triunfo de nuestra lucha, en acompañamiento con América Latina, les puedo asegurar que no la perdió nunca”, agregó Reverón.
De igual forma, la abogada habló del periodo histórico que vivió Mari Brás, cuando se descolonizaron naciones de Asia y África, se adoptó la resolución 1514 de la ONU y se creó el Comité Especial de Descolonización, hitos que marcaron la vida e ideología del pensador homenajeado. A pesar de siempre asumir posturas totalmente antimperialistas, Reverón recordó la “generosidad” de Mari Brás al reconocer el Partido Independentista Puertorriqueño (PIP) como un partido decolonial.
“En fin, estos discursos son lecturas obligadas para nuestra lucha. Poder ver el desarrollo de la nueva lucha por la independencia en las palabras de Juan, una lucha de intenso activismo, con un profundo contenido social, una preclara visión de nuestro lugar en el mundo y de cómo los acontecimientos allá, afuera de nuestra isla, influyen, provocan y nos ayudan a crecer políticamente”, concluyó Reverón.
Por su parte, Santiago Cintrón comparó estos discursos del libro con instrumentos que en el camino de la lucha terminan enriqueciendo la militancia individual. Aunque deslindó las condiciones del pasado de las de ahora, Santiago Cintrón recalcó la importancia de que ambas épocas “dialoguen”.
“Para mí, esto es un excelente libro de comienzo para aquellos, aquellas y aquelles compas que empiecen a querer leer y entender mejor nuestro pasado de lucha. Desde la perspectiva de estudioso, creo que es un excelente instrumento para poder desarrollar y entender el pensamiento de Juan, tanto a nivel temático como en su propio contexto”, explicó el director de la revista digital.
Además, el licenciado Santiago Cintrón coincidió con Reverón respecto a cómo la segunda mitad del siglo pasado influyó en Mari Brás. Con revoluciones sociales efervescentes, triunfos sin parangón y un futuro “en blanco”, para los ponentes no resultó sorpresa que los discursos del cofundador de CLARIDAD tuvieran “mucha esperanza”. Como ejemplo de su argumento, citó del libro:
Pero Puerto Rico está en el efervescente Caribe. En el Caribe que ha dejado de ser ese lago sereno americano, propiedad de los Estados Unidos.
Como cierre de la actividad, la música típica de Tony Mapeyé y su orquesta deleitó a todos los presentes. Entre tertulias, risas y comida, el recuerdo de Mari Brás continuó su tarea de reunir, en una causa, a quienes sueñan con la libertad del País.