En Rojo
En octubre de 2024, la cantautora Virgen Milagros Orta Rodríguez, mejor conocida como Choco Orta, lanzó su novela autobiográfica, Si me comprendieras. Con el libro, la también actriz narra la historia de su vida, desde su crianza en la calle Carmen de Santurce hasta las colaboraciones con artistas como Tito Puente, Gilberto Santa Rosa y Catalino “Tite” Curet Alonso.
“Si me comprendieras es un recuento de datos que narran cómo la vida va moldeando el carácter de las personas, y cómo sus decisiones y valentía pueden cambiar para bien su destino”, expresó el Caballero de la Salsa sobre el texto de 33 capítulos.
La biografía comienza con la infancia santurcina de Orta, en la década de 1950. Con un tono íntimo y casi de confesión, la salsera evoca la época en que convivió con sus cuatro hermanos, su tía, su padre plomero y su madre “sometida a los mandatos del machismo”. Esas influencias, según va revelando la propia Orta, influyeron fuertemente en su visión del mundo.
“Cuando comencé a hacer análisis críticos sobre los niveles de conciencia de mi familia en muchos aspectos, me di cuenta que los Orta Rodríguez crecimos en dos corrientes igual de destructivas: la <<inferioridad racial>>, por venir de gente negra, y la presión de tener que <<mejorar la raza>> por descender de un lejano antepasado español”, explica la cantante en la página 60 del libro.
En el crisol de ese imaginario, donde las tendencias “rebeldes” de Orta chocaban con el conservadurismo convencional de sus familiares, la autora recuerda peleas, traumas y aprendizajes que surgieron del núcleo familiar. Entre las lecciones más memorables del texto, la salsera declara cómo, en algún momento de su vida, decidió que “no quería repetir el destino que las mujeres de mi familia materna y paterna vivieron al quedarse con el único primer triunfo de sus vidas: ser mujeres sometidas por una sociedad que limitaba sus libertades” (página 73).
Aun así, Orta destaca en su biografía el rol protagónico que la música ocupó en su hogar. Con una consola tocadiscos marca Zenith, la hija de Andrea y Tomás narra cómo los Orta Rodríguez se repartían las congas, los güícharos y las voces para descongelar <<los problemas tan comunes en hogares populares como el mío, en los que Cortijo y su Combo, Ismael Rivera y otros artistas tenían ese extraño poder de apaciguar los conflictos de un hogar>> (página 97).
“Desde entonces, la salsa dejó de ser un coqueteo y pasó a ser una condición de vida” (página 83).
En esa nueva condición, Choco Orta enfrentó otra retahíla de desafíos que continuaron impactando su sello musical. En una industria y género dominados por figuras masculinas, Orta abrió paso para su identidad como mujer negra y abiertamente lesbiana. A pesar de los altibajos, la autora traza su trayectoria desde que reclamó, de pequeña, un espacio en El Alambique de Loíza hasta que compartió tarima con Celia Cruz y Oscar D’León, en 2000.
“Por ser mujer tenía el peso del machismo encima, pero me sentía con el derecho de ser escuchada, porque si en las congas encontré un refugio contra rechazos sentidos desde niña por negra, pobre y para incomodidad de muchos cachapera, decidí no escondérmele a nadie, por eso me dispuse a desafiar lo que fuera con tal de sentirme contenta conmigo misma”, confesó Orta en la página 120 de Si me comprendieras.
En ocasiones, el texto da al lector la impresión de estar junto a Choco Orta, escuchando las historias que conforman su vida cual si fueran Pedro Navaja, Juan Pachanga u otra anécdota envolvente de la sala. Con acepciones populares, refranes y un tono nostálgico, el libro logra situarse como el relato de una salsera puertorriqueña, negra y plena en todos sus proyectos y producciones. La publicación de esta autobiografía se suma al busto de Orta en la Plaza de los Salseros, a su reconocimiento en la Sala de la Fama de la Música de Puerto Rico y otros tantos logros que afianzan la marca de Orta.
“Preparada, educada y consciente de que lo único que se le haría fácil en su carrera era cantar, tocar e improvisar; lo demás tendría que trabajarlo muy duro, y lo ha logrado. Más allá de sus logros artísticos pienso que labrarse un lugar en un medio tan competitivo y por qué no, machista, es su mayor éxito”, añade Santa Rosa en la contraportada de Si me comprendieras.
El libro esta a la venta en la CLARITIENDA