De vuelta a la luna desde Puerto Rico

Nuevas reglas sociales. Seres artificiales modificados genéticamente para servir a los humanos. Ese es el dilema ético y moral en películas como Blade Runner inspirada por una novela de Philip K. Dick o Ex-Machina de Alex Garland. También es el tema principal de la novela Arnel Bernulli: De vuelta a la luna del escritor y profesor universitario Pedro L. Cartagena.

En un futuro no muy lejano los recursos naturales del planeta, el calentamiento global y otros fenómenos que conocemos hoy día pudieran afectarnos al punto de tener que buscar nuevas alternativas para poder darle continuidad a nuestras vidas. De ser así, lo lógico sería establecer una estación en la luna, nuestro satélite, para salir hacia otros planetas o galaxia.

Luego de que Bernulli abordara una misión para fundar una colonia en el exoplaneta Pietra2 —un planeta fuera de la órbita solar— su hijo Arnel Bernulli llega de la luna para conocerlo. Si bien la primera parte de esta aventura galáctica, titulada “Aldanze Genoma”, se enfocó en detallar el contexto espacial y dar a conocer los personajes más importantes, en esta ocasión la trama va un poco más allá.

Cartagena explicó en entrevista para En Rojo que en el proceso de establecer una nueva sociedad la novela presenta reflexiones morales y éticas sobre el futuro de la humanidad y las consecuencias de las manipulaciones genéticas. Es en este aspecto donde radica la importancia de un personaje como Aldanze Genoma, un ser artificial (híbrido) casi humano, desarrollado mediante técnicas de manipulación genética para servir a los humanos.

“¿Qué resolvieron los humanos de ese mundo imaginario de mi novela? Bueno, que no podían atender eso en el planeta Tierra por las religiones, los políticos, fundamentalistas. Pero como la Luna es un ambiente distinto allí se hacía lo que fuera”.

Una vez Arnel Bernulli abandona Pietra2, de vuelta a la Luna, se dedica prácticamente en un capítulo a discutir las nuevas reglas sociales, morales y éticas del nuevo mundo, particularmente con lo relacionado a los derechos de los clones, genomas, híbridos y androides.

¿Qué significa escribir Ciencia Ficción

en Puerto Rico?

El profesor del departamento de Ciencias de Cómputos en la Universidad de Puerto Rico, en Arecibo, explicó que según lo que ha presenciado en librerías o periódicos la literatura más reciente gira en torno a la escritura urbana, la narco literatura, el discrímen en la diáspora, entre otros; pero en términos de Ciencia Ficción es muy poco lo que se produce en Latinoamérica, afirmación discutible. Según Cartagena esto se debe a que tenemos que resolver nuestros problemas inmediatos: comida, empleo, seguridad, entre otros.

“Latinoamérica es pobre en términos generales. El poder reside en imperios como el norteamericano, la Unión Europea… después que tu tienes esos problemas [inmediatos] resueltos pues te puedes tirar en un diván a soñar con las estrellas. Pero nosotros tenemos que resolver el día a día. Mira este país como está con la Junta de Control, la incertidumbre…”

“Tratar de escribir como se escribe para Avengers, Star Wars, Alien, Blade Runner, ese tipo de literatura no se produce mucho en Latinoamérica. Hay mucho misterio y esoterismo, pero esa cuestión del espacio, imaginar el planeta dentro de 200 años no está tan presente en la mente de los latinoamericanos en general. Los hay pero no son tantos” añadió.

-¿Y por qué lo haces?

“Bueno, es que la vida es tan aburrida… [suelta una carcajada]. Desde niño me fascinó la ciencia más que nada”, dijo Cartagena cuya formación académica es en Ciencias de Computadora en la UPR y posee un doctorado en Sistemas de Información en la Universidad de Madison, en Wisconsin.

El escritor y profesor recordó que de niño vivía en Nueva York y su papá compraba el New York Times a diario. Allí aparecía Dick Tracy hablando con Pronto Gomez y todos sus oficiales policiacos desde su teléfono. Después, en la década de los 70’s, cuando estaba terminando esa tirilla, ya había imágenes en el teléfono y la gente se reía de eso. Sin embargo, hoy día tenemos un iPhone o Apple Watch… ya todo eso se puede hacer. Así, seguimos viendo que lo que en un momento dado algunos pensadores atrevidos soñaron sin reservas, hoy puede ser realidad.

“La búsqueda de exoplanetas donde pueda haber posibilidad de vida y dejar este que hemos destruido es un sueño que yo creo que la humanidad tiene la inteligencia y la capacidad para hacerlo realidad”.

Artículo anteriorPor la dignidad magisterial y en defensa de la educación pública
Artículo siguienteDoble impacto para atletas de la UPR