Somos todos Amazonia para la vida del planeta

Por Marcelo Barros/Especial para En Rojo

 

En la Iglesia Católica, hasta setiembre, se intensifican preparativos para el Sínodo de los Obispos, que el papa Francisco convoca para octubre. Su tema será La Amazonia, Ecología Integral: misión de Iglesia. Salió el documento de trabajo para el Sínodo. Sus propuestas, venidas de las consultas a las bases, son buenas. Al mismo tiempo, surgen reacciones violentas de algunos cardenales en Roma y amenazas del presidente brasileño contra el Sínodo y sus propuestas.  

Un excelente documento preparado por hermanos/as de la Red Evangélica Panamazónica y de Amerindia afirma: “La Amazonia es un territorio que se extiende a través de nueve países: Brasil, Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia, Venezuela, Surinam, Guayana y Guayana Francesa. Tiene casi 8,000,000 km 2 que forman un bioma, eso es, un sistema vivo de interacciones orgánicas, esencial para el equilibrio del planeta. Cada metro cuadrado del bioma de la Amazonia tiene más diversidad que cualquier otro lugar del planeta. En esa región, viven 35 millones de personas, dispersas por la selva, las orillas de los ríos, por los campos y también grandes ciudades. De esa población, casi tres millones pertenecen a pueblos indígenas que intentan mantener sus culturas propias y hablan 340 idiomas diferentes. Ellos se relacionan armoniosamente con la naturaleza, con otros humanos y con Dios. Forman comunidades, agredidas  en su conexión con la Tierra y en sus valores culturales y espirituales. La inmensa diversidad de vida (la biodiversidad) garantiza a todos alimentos, medicinas, aceite y otros regalos que ni siquiera se pueden calcular. El bioma regula la distribución de lluvia en todo territorio brasileño y aún por Uruguay, Argentina y Paraguay. El agua en forma de vapor crea lo que se llama “ríos voladores”, transportados por los vientos hacia el sur. Así, abastecen de lluvia a casi todo Brasil. Basta saber esto para darse cuenta de que la preservación y defensa de la Amazonía es fundamental para el equilibrio del clima del planeta. Actualmente, todo eso sistema natural es amenazado por el agronegocio y por las grandes empresas mineras. Las comunidades amazónicas nos llaman a luchar contra la explotación que destruye la región y somete la humanidad a una desigualdad cada vez mayor”. 

Mahatma Gandhi dijo que la Tierra es suficientemente grande para alimentar a toda la humanidad, pero no para saciar la ambición de la pequeña parte de seres humanos que acumula ganancias y avaricia. Para los cristianos, el Evangelio advierte: “No se puede servir a Dios y al dinero” (Mt 6:24). 

El autor es monje benedictino y ha escrito más de 40 libros.

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