Análisis de noticias
Después de casi tres años de continuas proclamas de inocencia, Wanda Vázquez va rumbo a Washington. La exgobernadora de Puerto Rico, acusada de haber cometido varios delitos – conspiración para cometer soborno, fraude con fondos federales y fraude electrónico- por la Oficina del Fiscal de Estados Unidos en Puerto Rico, supuestamente viaja en busca de un acuerdo que la exima de ir a juicio, y de la posibilidad de cumplir cárcel, por los delitos antes mencionados. Sus dos coacusados, el banquero Julio Herrera Velutini y el ex agente del Negociado Federal de Investigaciones (FBI), Mark Rossini también buscan un acuerdo.
Los delitos por los que se le acusa ocurrieron mientras ella era Gobernadora de Puerto Rico en el año 2020. Se alega que aceptó la cantidad de $300 mil, de parte de Herrera Velutini, presidente del banco internacional Bancrédito, para fondos de su campaña elecionaria de 2020, a cambio de que despidiera de su puesto al entonces jefe de la Oficina del Comisionado de Instituciones Financieras de Puerto Rico (OCIF), George Joyner. Se alega que Herrera Velutini quería «salir» de Joyner, por considerar que OCIF exigía demasiados requisitos a Bancrédito para su operación en Puerto Rico. Un tiempo después, Joyner renunció bajo presión y Vázquez nombró como jefe de OCIF a un recomendado por Herrera Velutini. Rossini, el ex agente del FBI, alegadamente fue el intermediario entre el banquero y la entonces Gobernadora en ese asunto.
Vázquez negó los cargos desde que fue acusada y arrestada en el año 2022, y hasta ahora no había mostrado intención de declararse culpable ni se había divulgado que procurara un acuerdo con la fiscalía federal en la Isla. Por el contrario, sus abogados parecían prepararse para un juicio donde se probaría su inocencia. ¿Qué cambió? ¿Por qué ahora un acuerdo, a raíz de que el juicio fuera señalado para el próximo 25 de agosto? ¿Por qué la reunión es en Washington y no en la Fiscalía Federal en San Juan? Se especula que la llamaron desde allá, pero esa información no ha sido corroborada. De todos modos, es extraño este súbito giro ahora. Extraño si, pero no inverosímil. Ir a juicio sería una apuesta arriesgada para Vázquez, que de ser hallada culpable, podría enfrentar una pena de hasta 20 años de cárcel.
Habiendo sido ella fiscal en Puerto Rico durante tantos años y, además, Secretaria de Justicia, y Gobernadora en una circunstancia tan irregular como la renuncia del gobernador que la puso en esa silla, y en medio de tanta confusión y facciones en pugna dentro del PNP en aquel momento y ahora, es posible y probable que al nuevo Departamento de Justicia del gobierno de Trump le interese escuchar la mucha información que Wanda Vázquez tiene sobre las interioridades del gobierno de Puerto Rico y del PNP, partido que ha ganado tres elecciones consecutivas aquí, pero no ha.podido sacudirse del lastre de la corrupción y la gobernanza deficiente y disfuncional.
Nadie da algo a cambio de nada, y en el sistema de justicia criminal estadounidense son expertos en los trueques donde el pez pequeño sirve de carnada para enganchar en el anzuelo al «peje gordo». Es cuestión de esperar un tiempo y se conocerán con lujo de detalles los resultados de la «reunión» de Wanda Vázquez y sus coacusados en la sede del Departamento de Justicia de Estados Unidos.