La diversidad y la historia en el 8vo Festival de Cine Europeo

Termino mi resumen del 8vo Festival de Cine Europeo con comentarios de cuatro filmes tan diversos en épocas, nacionalidad y ubicación de directores como las historias que cuentan.

A United Kingdom

(directora Amma Asante; guionista Guy Hibbert; autora Susan Williams; fotocinematógrafo Sam McCurdy; elenco David Oyelowo, Rosamund Pike, Tom Felton, Jack Davenport, Laura Carmichael, Terry Pheto, Jessica Oyelowo, Vusi Kunene, Nicholas Lindhurst, Arnold Oceng, Abena Ayivor, Jack Lowden, Zachary Momoh)

Este filme de la directora británica de descendencia ghanesa, Amma Asante, hace un enlace con esa época tan importante para el Partido Laboral británico. Pero en este caso es una mirada de 1948 desde afuera ya que el protagonista, Seretse Khama, es el heredero del reino de Bechuanaland (Bostwana desde 1966) pero estudiante de leyes residente en Londres desde hacía varios años. Cuando se le reclama su presencia en su país, comienza una transición que es interrumpida cuando conoce y se enamora de Ruth Williams, una oficinista de 24 años. A pesar del rechazo de sus familias y de las múltiples prohibiciones del gobierno británico, ambos deciden mudarse a Bechuanaland para dedicar sus vidas a este país. Raza y nacionalidad se vuelven piezas de un juego político.

El tema racial es un issue político que va más allá de si el pueblo acepta o no que su futuro rey tenga como esposa y reina a una mujer británica blanca. Bechuanaland es un protectorado de Inglaterra quien se siente en todo su derecho para prohibir el matrimonio de Seretse y Ruth ya que una unión de este tipo pondría en peligro la muy frágil alianza entre Gran Bretaña y Sudáfrica donde ya el apartheid era la ley en su territorio. Desestabilizar esta región significaría poner en peligro otras alianzas y la lucrativa explotación de diamantes. Debido a todo este enmarañamiento, aunque Seretse y Ruth se trasladan a su reino y son aceptados por su pueblo, Seretse retorna a Londres en 1950 para continuar negociaciones en cuanto a su sucesión. El gobierno británico, irónicamente bajo el control del Partido Laboral, le prohíbe regresar por cinco años. Cuando el conservador Winston Churchill asume el gobierno en 1951, ese exilio se vuelve permanente. La historia nos narra cómo este hombre y mujer enamorados y determinados a vivir juntos en la nación que ellos han escogido, logran hacerlo a pesar de los juegos políticos entre el colonizador y los países colonizados y los diferentes términos—protectorado o colonia—que les permitía correr sus asuntos.

Le gang des Antillais

(director Jean-Claude Barny; guionistas Jean-Claude Barny, Philippe Bernard, Thomas Cheysson, Ives Nilly, Zoe Galeron, Fred Foret; autor Loic Lery; fotocinematógrafo Claude Garnier; elenco Djedje Apali, Eriq Ebouaney, Adama Niane, Zita Hanrot, Romane Bohringer)

Este filme del director de Guadeloupe Jean-Claude Barny también recrea una época política que afectó a la población antillana en Francia, su mayoría proveniente de Martinica y Guadalupe. La historia se presenta como la desilusión con el proyecto BUMIDOM (1963-1981) que prometía empleos, vivienda y educación a los emigrantes de las islas de ultramar. Este proyecto de aliviar el desempleo y la pobreza en el Caribe francófono en muchas instancias, en vez de establecer igualdad entre los ciudadanos franceses no importara su localización, trajo más aislamiento. Jóvenes como Jimmy Larivière, sin vivienda, desempleado o con subempleos y, en su caso en particular, con una pequeña hija, ven como únicas salidas el regreso a su isla de origen—su peor opción por entender que eso es admitir derrota—o ser parte de grupos de delincuentes que logran acumular dinero fácil (en este caso robando las oficinas de correo) y evadir la ley por algún tiempo. Sí se plantea muy claramente las diferencias en la manera de pensar y actuar de hombres y mujeres del Caribe. Ambos se sienten frustrados y discriminados; pero mientras Jimmy solamente ve el problema y su solución inmediata, Linda aprovecha la oportunidad de estudiar y aprender destrezas—en este caso como enfermera—aunque no pueda aspirar a ser médica. Para ella el tener un empleo estable que le permita una normalidad en Francia es su prioridad.

Monsieur Chocolat

(director Roschdy Zem; guonista Cyril Gely; fotocinematógrafo Thomas Letellier; elenco Omar Sy, James Thierrée, Clotilde Herme, Olivier Gourmet, Frédéric Pierrot, Noémie Lvovsky, Alice de Lencquesaing)

Este filme del director francés de descendencia marroquí, Roschdy Zem, nos lleva a finales del siglo 19 y su circuito circense y de vaudeville. Son los lugares públicos donde lo feo y bello, lo aceptado y rechazado, lo grotesco y fenómeno conviven y donde la payasería es el arte de hacer reír. George Foottit, de origen británico, es un payaso muy inventivo pero también alguien que se reinventa continuamente. Trata de que el administrador/dueño del circo vea que las cosas nuevas también atraen al público. Rafael Padilla, alias Chocolat, por su parte, hace el papel de caníbal y todos se ríen porque es negro y como africano, por supuesto, que tiene que comerse a los blancos. Foottit, payaso y acróbata de renombre pero venido a menos, convence a Rafael de unir sus actos como el payaso blanco que abusa física y verbalmente del negro medio idiota que de vez en cuando se sale con la suya. El acto es tan exitoso que logran montarlo por su cuenta y llegar a la fama en París. Pero Rafael no puede olvidar el vínculo familiar que tenía en Cuba cuando era esclavo. Por eso se rebela contra su amigo y pierde lo ganado en fama pero recupera su dignidad.

Lady Macbeth

(director William Oldroyd; guionista Alice Birch; autor Nicolai Leskov; fotocinemtógrafo Ari Wegner, elenco Florence Pugh, Christopher Fairbank, Cosmo Jarvis, Bill Fellows, Paul Hilton, Naomi Ackie)

A pesar de su título y su referente shakespeareano, la historia se basa en la novela de 1865 del escritor ruso Nicolai Leskov, y se desarrolla dentro de la sociedad oligarca y feudal de la época. Como sucedía con todo lo referente a esta clase, tanto la tierra, los siervos/sirvientes y las mujeres para esposas se compraban a la conveniencia de los dueños absolutos de la región. El realizador inglés William Oldroyd adapta la historia a la Inglaterra victoriana. En esta ocasión la muy joven Katherine es comprada para esposa de Alexander, el hijo de Boris, patriarca y dueño de las tierras, para asegurar su descendencia. Claramente a Alexander no le interesa esta unión y trata a Catherine como si fuera un objeto que entorpece su camino. Ella resiste el maltrato y poco a poco aprende a cómo manipular y conseguir lo que en verdad quiere: sexo y poder. Utiliza a Sebastian, obrero/siervo, para satisfacer sus necesidades y poco a poco neutraliza a sus opositores en este sistema patriarcal: suegro, marido, hijastro ilegítimo, amante con el método más efectivo para centralizar su poder sobre todo y todos. Las actuaciones son de primera en un ambiente tenso que no afloja en ningún momento.

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