A 50 años del grito de la Iglesia en América Latina

El obispo de los indígenas de la Amazonía, Pedro Casaldáliga, cumplió sus 90 años el pasado mes de febrero de 2018. Durante este año, la Iglesia Católica en América Latina también conmemora un suceso muy importante: los 50 años de la Segunda Conferencia General del Episcopado Latinoamericano celebrada en Medellín, Colombia. En 1968, el Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM) organizó este evento eclesial, que aquí llamaremos la Conferencia de Medellín en 1968, con el objetivo de poner al día a la Iglesia, lo que representó un hecho realmente significativo en la historia de la Iglesia de América Latina y el Caribe.

Los obispos reunidos allí respondieron a las exigencias del momento histórico y aplicaron, en términos generales, los lineamientos que había expuesto años atrás la Iglesia romana a través del Concilio Vaticano II (1962-1965). De modo que la Iglesia latinoamericana recogió lo mejor de Vaticano II, pues vio en ese concilio un signo de esperanza para los pueblos oprimidos. La Iglesia en América Latina, por tanto, formuló un proyecto eclesiástico desde su propio contexto histórico.

La Conferencia de Medellín inauguró un nuevo magisterio en América Latina, bajo la óptica de un análisis crítico de su realidad como región y desde los postulados evangélicos de la denuncia profética.1 A partir de ahí hubo una creciente opción a favor de los pobres y una inclinación a la praxis de las llamadas comunidades de base y de los proyectos de educación popular.

Conviene recordar que la Conferencia de Medellín de 1968 nació en medio de numerosos acontecimientos importantes. Los sucesos políticos, económicos y sociales que acontecían a nivel internacional fueron, en definitiva, los que empujaron y provocaron las grandes transformaciones dentro de las iglesias durante este período de estudio. El mundo vivía el período de la Guerra Fría, y en un contexto donde se evidenciaba un proceso de ebullición y agitación, producto del descontento por la falta de un modelo económico, político y social a tono con las necesidades de los más pobres.2

Los `60 desembocaron en una ola de actividad y beligerancia que trazó un camino a la confrontación y al replanteamiento, por ende, al desarrollo de una nueva cosmovisión. La Guerra de Vietnam, los procesos de liberación y descolonización en África, las luchas sociales y políticas de los negros, estudiantes y mujeres en Estados Unidos y la llamada Revolución Cultural Mundial, permitieron un nuevo escenario que tuvo como resultado la gestación de un discurso de liberación.

En América Latina, la Revolución Cubana sirvió de trampolín para otros procesos de liberación. Ésta se convirtió en referente para miles de jóvenes y estudiantes, cuyas consignas giraban en torno al enfrentamiento contra el imperialismo y el “orden burgués”. En 1966, murió en combate el cura colombiano Camilo Torres, cuyo ejemplo se convirtió en un modelo para muchos latinoamericanos. Y en 1967 fue capturado y ejecutado de manera encubierta el guerrillero Che Guevara.

A continuación, algunos de los puntos discutidos por los obispos y sus ayudantes en la Conferencia de Medellín en 1968:

1. La Iglesia en América Latina debe centrarse en las necesidades del hombre y la mujer.

2. Existe un deseo de parte de la Iglesia por la emancipación total y una liberación de toda servidumbre.

3. La Iglesia se debe orientar hacia un espíritu de pobreza.

4. La juventud, la mujer, los campesinos y la clase media deben ser tratados con respeto y justicia.

5. La Iglesia se preocupa ante el éxodo de profesionales y técnicos a países más desarrollados.

6. En América Latina se han creado sistemas económicos que sólo han beneficiado a los sectores de alto poder adquisitivo.

7. La Iglesia debe buscar que los bienes creados puedan llegar a todos de forma más justa.

8. La organización sindical obrera deberá adquirir suficiente presencia.

9. Ante la necesidad de un cambio global en las estructuras latinoamericanas, se hace pertinente la reforma política.

10. Los países de la región son dependientes de un centro de poder económico, por tanto, resulta que no son dueños de sus bienes ni de sus decisiones económicas.

11. Existe una desproporción de los salarios con las condiciones reales de la familia.

12. Además, hay una imposibilidad material para muchos jóvenes de construir dignamente una familia.

13. La Iglesia denuncia el imperialismo de cualquier signo ideológico, que se ejerce en América Latina.3

Si se fijan, las observaciones y conclusiones que hace la Conferencia de Medellín en 1968 tienen tangencias con nuestra realidad actual como pueblo. El Puerto Rico de hoy se encuentra sumido en la mayor absoluta dependencia. Cerca de 40 municipios, antes del huracán María, tienen más del 50% de su población bajo el nivel de pobreza.4 La emigración ha sido en los últimos años descomunal. Los expertos indican que la presente ola migratoria apunta a ser más grande que “el Gran Éxodo de 1945-1960, período de 15 años durante el cual se estima que 500,000 puertorriqueños emigraron en términos netos”.5

El colonialismo se evidencia de una forma “monda y lironda”. La llegada de la Junta de Control Fiscal ha venido a restregarles la verdad en la cara a los puertorriqueños sobre su cruda realidad colonial. Esta falta de poderes políticos no ha permitido que seamos dueños de nuestros bienes y recursos. Por su parte, los trabajadores y la clase media están, cada día que pasa, en un peor estado debido a la pérdida de sus derechos.

Hace unos meses atrás, un grupo de analistas presentaron el texto Comentario a la Reforma Laboral 2017. Los autores del mismo plantearon en conferencia de prensa lo siguiente: las nuevas políticas laborales no constituyen una política de empleo coherente y racional, sino un conglomerado desarticulado de políticas dirigidas al crecimiento económico, al pago de la deuda y hacia un mercado de trabajo caracterizado por la inestabilidad e inseguridad laboral.6

María de Lourdes Guzmán hace una buena radiografía sobre Puerto Rico en tiempos recientes. Apunta ella que Puerto Rico confronta la peor crisis en tiempos modernos: una deuda pública que supera los $70,000 millones de dólares, un multimillonario déficit gubernamental, el posible cierre de 300 escuelas, despidos a empleados transitorios, reducción de las pensiones, la debacle en el plan de salud del gobierno, una criminalidad rampante y la corrupción en todos los niveles.7

Por eso creemos pertinente, así como lo harán diversos sectores en América Latina, discutir los alcances e ideas de la Conferencia de Medellín en el nuevo contexto socio-cultural, político y económico de Puerto Rico. Además, como elemento imprescindible, debemos reconocer la importancia y la fuerza de las iglesias, católicas y protestantes, para enfrentar la dura realidad del país.

El papa Francisco retomó la doctrina de la Segunda Conferencia General del Episcopado Latinoamericano en Medellín (1968), amparándose en una Iglesia servidora y pascual, comprometida con la liberación de todo ser humano y de cada persona en su integridad. Después de este huracán que desveló nuestra fragilidad, las iglesias deben trabajar a favor de un proyecto de país que busque recomponer, desde una óptica de liberación, las bases sociales, económicas y políticas de nuestro pueblo.

El autor escribió el libro de Católicos rebeldes en Puerto Rico durante la Guerra Fría

NOTAS

1Conferencia Episcopal Peruana, Conclusiones, Medellín, II Conferencia General del Episcopado Latinoamericano (Lima: Paulinas, 2005), pp. 17-18.

2Este proceso se puede ver resumido en José Enrique Laboy Gómez, Revolución y liberación mundial durante la Guerra Fría (Editorial Akelarre, 2017).

3Conferencia Episcopal Peruana, Conclusiones, Medellín, II Conferencia General del Episcopado Latinoamericano (Lima: Paulinas, 2005), pp. 27-45.

4Michelle Estrada Torres, “Miseria que azota a Puerto Rico”, Primera Hora, 16 de marzo de 2017, tomado el martes 5 de septiembre; disponible en https://www.primerahora.com/noticias/puerto-rico/nota/miseriaqueazotaapuertorico-1212015/; Internet.

5“La migración en Puerto Rico alcanza récord histórico”, Primera Hora, 2 de mayo de 2017, tomado el martes 5 de septiembre de 2017; disponible en https://www.primerahora.com/noticias/puerto-rico/nota/lamigracionenpuertoricoalcanzarecordhistorico-1204578/; Internet.

6“Expertos de temas laborales”, Metro Puerto Rico, 18 de julio de 2017, tomado el martes de 5 de septiembre de 2017; disponible en https://www.metro.pr/pr/noticias/2017/07/18/expertos-de-temas-laborales-denuncian-consecuencias-de-la-reforma-laboral.html; Internet.

7María de Lourdes Guzmán, “Estados Unidos echó a pérdida a Puerto Rico”, El Nuevo Día, 4 de mayo de 2017, tomado el martes 4 de septiembre de 2017; disponible en Invitadahttps://www.elnuevodia.com/opinion/columnas/estadosunidosechoaperdidaapuertorico-columna-2317766/; Internet.

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