Por Vanesa Baerga/CLARIDAD
El pasado lunes, 19 de junio tuvo lugar la sesión anual dedicada al caso colonial de Puerto Rico en el Comité de Descolonización de las Naciones Unidas, donde se presentó por primera desde que fuera excarcelado el pasado 17 de mayo, el ex prisionero político puertorriqueño Oscar López Rivera. Desde ese mismo hemiciclo, el Comité había incluido año tras año en su resolución, el pedido de excarcelación de quien ha sido considerado por el mismo presidente del Comité de Descolonización, Rafael Ramírez Carreño, como “un ícono de los movimientos de autodeterminación y símbolo de la resistencia firme, frente a quienes pretenden negar la dignidad del ser humano expresada en igualdad, justicia, independencia y soberanía”.
Para López Rivera, en este día se logró llevar el mensaje de la necesidad que se lleve el caso ante la Asamblea General, que para él era lo más importante de su participación. “Tenemos que ir empujando eso más y más, pero por lo menos ya se planteó frente al Comité. Ahora por delante, queda el trabajo que hagamos para empujar ese asunto.”
Durante este día pudo conversar con Ramírez Carreño y otros miembros diplomáticos. Allí también conversó con varios medios latinoamericanos, y apuntó que el próximo julio viajará a Nicaragua. No sabe cuándo visitará Venezuela, pero es algo que tiene pendiente organizar.
A lo que añade que sus entrevistas a medios latinoamericanos o venezolanos puede que sea un poco controversial. “Todo lo que se diga sobre Venezuela, o cualquier expresión de apoyo a Venezuela va a generar algún tipo de controversia. Así que hoy o mañana se van a escuchar los comentarios negativos. Pero para eso estamos listos,” aseguró.
A la controversia que surgió sobre el tiempo adicional que le otorgó el Comité de Descolonización para exponer su ponencia, reaccionó que “ese tiempo que le dieron (al Secretario de Estado, Luis G. Rivera Marín), yo creo que es más que suficiente para lo que él tenía que decir.”
Y es que al salir de la sede de las Naciones Unidas luego de presentar su ponencia, Rivera Marín lamentó, según varios medios de comunicación, que le hubieran apagado el micrófono cuando todavía no había acabado su ponencia, mientras que Oscar pudo expresarse por alrededor de 20 minutos. Cabe destacar que el tiempo de cada peticionario es de cinco minutos, y antes de que comenzara la sesión se había señalado que López Rivera sería a la única persona que se le iba a dar tiempo adicional para completar su ponencia.
“Lo que dijo el miembro del Partido Nuevo Progresista (refiriéndose a Rivera Marín) frente al Comité no tiene nada que ver con el caso colonial de Puerto Rico porque lo que busca el PNP no es la descolonización de Puerto Rico, sino la colonización perenne de Puerto Rico,” indicó.
López Rivera dice que no puede entender como personas que han jugado a ser administradores de la colonia pueden hablar de descolonizar a Puerto Rico. “Si ellos fuesen serios, en ese sentido, no estuvieran jugando a la politiquería, no estarían tampoco gobernando la colonia. Si uno acepta administrar la colonia, ¿cómo es posible decir que no están gobernando ni están a cargo de lo que está pasando en Puerto Rico? Ellos (el Partido Nuevo Progresista) ha jugado un papel bien importante con todo lo negativo que pasa en Puerto Rico, sea la deuda, la corrupción, la privatización en Puerto Rico, y yo diría que, hasta esta cuestión de la gentrificación. La privatización de Puerto Rico quiere decir que, poco a poco, otras personas se están adueñando de Puerto Rico. Entonces, ¿cómo es posible que se esté hablando de descolonización cuando se está llevando a cabo ese tipo de trabajo? Ellos lo que han hecho es administrar la colonia.”