Dedicación 101

¿Cuántas columnas sobre deportes escribió Elliott Castro para CLARIDAD? La información que puedo aportar no contestará la pregunta; pero al menos ofrece un punto de partida que nos acercará a la respuesta.  Su primer trabajo trataba de una pelea entre Alfredo Escalera y Kuniaki Subata por la corona mundial superpluma celebrada en Japón en julio de 1975. Elliott la tituló:  “A pesar de todo El Salsero puede ganar”. Es importante mencionar que Escalera ganó y que faltaban cinco meses para el comienzo de CLARIDAD Diario.

Han transcurrido cuarenta años. Durante este periodo —¿me arriesgo a decirlo?— Elliott Castro ha sido la persona que más páginas deportivas ha escrito no solamente en CLARIDAD, sino en todo Puerto Rico.

¿Cómo lo hizo? Con dedicación, vocación y el apoyo de sus lectores. Escribió sobre casi todos los deportes, desde las 3B, hasta hipismo, pista y campo, deporte intercolegial, voleibol, maratones, lucha libre y más. Cubrió consistentemente la participación de la mujer en el deporte y no olvidó a los atletas aficionados.

Una evaluación sobre lo publicado por Elliott Castro estaría incompleta si se limitara a criterios  cuantitativos. Es necesario incluir el tema un poco complejo de cómo él se enfrentaba a la página en blanco. Lo hacía con la peligrosa soltura de quien en ocasiones traslada estilos radiales a la palabra escrita. Nunca tuvo problemas con estas acrobacias. Creó formas apoyadas en mezclas de fervor y júbilo; pero siempre controladas por la honradez. Fue incapaz de omitir o tergiversar hechos para convencer con a sus lectores de alguna tesis oculta. En ocasiones, sí hubo sesgos o imprecisiones que se originaban en un deseo siempre optimista de que Puerto Rico sobresaliera en el mundo deportivo.

Obtenía satisfacción cuando descubría novatos que luego representarían al País por muchos años. Escribía sobre ellos comentando del progreso que ya podía observarse y los estimulaba a superarse con palabras que destacaban el honor y el privilegio de ponerse un uniforme con el nombre de Puerto Rico.

Elliott conectó con sus lectores como pocos otros cronistas deportivos.  Cuando seleccionaba temas alrededor de expectativas, lo seguían aun sabiendo que al final podía haber lamentos en lugar de celebraciones. Tal vez adivinaban que en el fondo Elliot era uno de ellos, que ven fantasmas corriendo y saltando en una pista desierta y que siempre necesitan tocar una bola que está en reposo.

Si eliminamos los deportes de la vida de Elliott Castro, ¿con qué nos quedamos?

Para que se tenga claro por qué se le dedica el Festival de CLARIDAD recordemos lo siguiente:

Presidente de la Juventud Independentista Universitaria (JIU) en el Colegio de Mayagüez.

Macaneado por la Policía —en la cabeza—en una manifestación de esa colectividad.

Asesor legislativo de Carlos Gallisá en la Cámara de Representantes desde 1972 a 1976.

Participante activo en las protestas contra la Marina en Culebra.

Preso por protestar contra la Marina en Vieques.

Por los más de cuarenta años dedicados a CLARIDAD.

Su patriotismo se hizo menos visible por causa de la gran presencia que tuvo en Claridad Diario.

Por su dedicación a la Patria y al deporte puertorriqueño, Elliott Castro tiene méritos para recibir el reconocimiento que hoy se le hace.

Jaime Córdova

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