Encuentro del Pueblo de Dios – juntos en camino

 

Especial para En Rojo

La comunidad ecuménica de Taizé, en Francia, y otras 60 organizaciones ecuménicas, así como diversas federaciones de iglesias evangélicas, invitan a jóvenes de todo el mundo a unirse en oración y vigilia en un proyecto llamado Togheter (juntos). Se trata de un proceso de diálogo y un camino común que jóvenes de entre 18 y 35 años están llamados a emprender. Mientras se abre en Roma, el 4 de octubre, la primera sesión mundial del Sínodo de los Obispos sobre el camino de sinodalidad que debe seguir la Iglesia, grupos de jóvenes de los más diversos tipos, sea miembros de la Iglesia, sea de la sociedad civil, están invitados a reunirse para ensayar caminos de unidad y de paz de la humanidad, en el cuidado de la Madre Tierra, nuestra casa común.

El inicio de este proceso tendrá lugar el sábado 30 de septiembre y ha sido convocado por el Papa Francisco. El domingo 15 de enero de este año en Roma, al final del rezo del Ángelus, el Papa Francisco anunció que los trabajos de la próxima asamblea del Sínodo de la Iglesia católica estarán precedidos por una vigilia ecuménica de oración, que se celebrará el sábado 30 de septiembre en la Plaza de San Pedro. Afirmó: «El camino de la unidad de los cristianos y el camino de la conversión sinodal de la Iglesia están unidos. Aprovecho la ocasión para anunciar que el sábado 30 de septiembre se celebrará una vigilia ecuménica de oración en la Plaza de San Pedro, en la que confiaremos a Dios los trabajos de la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos. Para los jóvenes que acudan à la vigilia, habrá un programa especial durante todo el fin de semana, animado por la Comunidad de Taizé. Invito a los hermanos y hermanas, jóvenes de todas las confesiones cristianas, a participar en este «Encuentro del Pueblo de Dios»».

Esta vigilia ha sido preparada durante varios meses por representantes de unas 50 organizaciones y entidades de diversas Iglesias y de carácter ecuménico. Mientras que jóvenes de entre 18 y 35 años de toda Europa se reunirán la noche del sábado 30 de septiembre en la Plaza de San Pedro de Roma, las organizaciones implicadas en este proyecto Together proponen que jóvenes y adultos se reúnan en las más distintas regiones del mundo de Dios, en vigilias de oración y de marcha para formar una red de energía de amor y de paz que inunde el mundo.

En la oscuridad de nuestras noches, encendamos velas que simbolicen la luz para los caminos que tenemos por delante. Así podremos asumir la profecía del proyecto divino de Paz y Justicia de forma no violenta, empezando por la organización de pequeñas comunidades de Pastoral Juvenil, redes ecuménicas de jóvenes o grupos independientes que puedan ser células y laboratorios que ensayen un mundo nuevo posible.

Quien desea seguir la información sobre la vigilia en Roma, consulte: https://together2023.net/pt/info-page/genese-do-projecto/

Si desea inscribirse, aquí tiene el sitio para hacerlo:https://together2023.net/pt/info-page/carta-de-inclusao/

En este momento del mundo, para enfrentar los desafíos actuales, guerras, conflictos y divisiones que hieren a la familia humana, necesitamos escuchar los gritos de los pueblos crucificados por el Capitalismo y por la inhumanidad de las élites que se apoderan de los bienes de toda la tierra.

Es el Espíritu de Dios, la Ruah Divina, quien nos llama y nos abre un camino para avanzar con Cristo, como compañeros de viaje, junto a la multitud de excluidos que viven en los márgenes de nuestras sociedades. En este camino, en un diálogo que reconcilia, queremos recordar que nos necesitamos unos a otros, no para, juntos, ser más fuertes, sino como contribución a la paz en la familia humana. Juntos, queremos escuchar los gritos y gemidos de la Madre Tierra. Así, podremos caminar juntos como pueblo de Dios, profecía de una humanidad reconciliada y unida. Y entonces experimentaremos la verdad de lo que escribió el Apóstol Pablo: «Donde está el Espíritu de Dios, allí hay libertad» (2 Cor 3,6).

Artículo anteriorCrucigrama-María de los Ángeles Castro Arroyo
Artículo siguienteEqualizer 3: fin de una gran secuela