En el 1950 el Congreso de Estados Unidos impone la Ley 600, el dulce para hacernos tragar una medicina amarga, el Estado Libre Asociado. El Partido Nacionalista, bajo el liderato de Pedro Albizu Campos, organiza lo que parecía ser la única salida: Revolución. El 30 de octubre de 1950 poco más de medio centenar de hombres y mujeres entran en combate a pleno mediodía contra unos cuatromil militares de la Guardia Nacional y la Policía Colonial.
Se escuchó en el mundo un grito por la Independencia, contra el coloniaje y por la dignidad. Compartimos algunas imágenes. El olvido no es una opción.