Organizaciones se solidarizan con familia desahuciada en playa India

 

Especial para CLARIDAD

 

La familia en cuestión reside en el espacio hace más de 140 años

La semana pasada, el Tribunal Supremo de Puerto Rico (TSPR) negó atender, por tercera vez, el caso de doña Ramona Cruz Sanabria, que trata del desahucio de ella y su familia, quienes llevan más de 140 años ubicados en Playa India, Aguadilla. En respuesta a la orden judicial, varias colectividades, como La Colectiva Feminista en Construcción y Salvemos a Playuela, repudiaron la decisión con muestras artísticas y una cadena humana,

“Quiero agradecer a cada uno de los que están aquí, dándole un abrazo a mi abuela. Esto, para nosotros, vale oro. Son bienvenidos todos los días, cuando quieran, para lo que sea. Abuela me conoce como su nieto/nieta, y soy familia, pero aparte de eso soy artista”, expresó Tiara Pérez Jaime, nietx de Ramona. Una canción que incluye mensajes que denuncian el desplazamiento por capital extranjero se presentó al comenzar la actividad.

En la entrada de la casa de doña Ramona, hay un balaústre del que crece una trinitaria sin flores. Allí, donde las gallinas, los gallos y los pollos anidan, yace, por más de un siglo, la casa de doña Ramona. Por los alrededores del hogar aguadillano, estaciones de sopa, materiales de protesta, artesanías para la niñez y un manto violeta que leía “Justicia para Ramona” manifestaron su repudio por la orden del TSPR.

Frente al hogar, una enorme mansión nueva, con habitaciones idénticas, se impone en la zona costera, cuya zona marítimo-terrestre solo se limita al área de la familia de Cruz Sanabria.

Bitita Plumey, candidata a la alcaldía de Isabela por el Partido Independentista Puertorriqueño (PIP) y la Alianza de País, dio cita al “abrazo solidario”, junto a Yayita, una muñeca de trapos que le acompaña en sus denuncias.

“Yayita está apoyando a Ramona. Yayita va a todo lo que signifique defender a Puerto Rico. Defender al archipiélago, defender a su gente contra los abusos del gobierno, de LUMA, de todas las situaciones detrimentales que suceden en esta patria”, aseveró la creadora del personaje que nació en el Verano de 2019.

Mientras, la propia Cruz Sanabria bailó una bomba vestida de un traje de amapolas, la misma flor que llevaba en su oreja. La tarde continuó entre poemas, canciones y muestras de solidaridad por la familia de nueve. Como muestra de rechazo a la orden, las personas presentes hicieron una cadena humana alrededor del hogar, desde la calle hasta el carso.

“Ramona es la cara de todas las personas viendo las amenazas de desplazamiento en todo Puerto Rico; hay un patrón claro. Detrás de nosotros podemos ver la nueva adición a la comunidad de Playa India. Era supuestamente de los Añeses, que son los que quieren desplazar a Ramona”, expresó la portavocía de la manifestación, que denunció los costos —a $300 la noche, según la protesta—, de las nuevas construcciones.

Tecnicismos rodean la casa de Ramona

 Algunos vecinos limítrofes de la familia Cruz Sanabria, quienes prefirieron mantener el anonimato, aseguraron que los terrenos que ocupa la familia centenaria están clasificados como zona marítimo-terrestre y que, por eso, quieren desahuciar a la familia. Además, los residentes destacan cómo las ofertas de compra de terreno llegan “a cada rato, de gente de aquí y afuera”.

No obstante, en un aparte de sugerencias y comentarios, se discutió la improbabilidad de que el Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA), el único tercero que puede desahuciar a la familia mediante un tribunal, quiera “crear el precedente” de remover personas de un lugar por estar en zona marítimo-terrestre, porque implicaría la responsabilidad de hacer lo mismo en muchísima otras costas del país.

Por su parte, La Colectiva Feminista en Construcción también defendió el derecho a que las personas permanezcan en esta zona, donde el ritmo del desplazamiento es más notable que en otras áreas del país.

“Esta lucha aquí es representativa de una lucha nacional. En todos los rincones preciosos de Puerto Rico estamos viendo este mismo patrón, especialmente en los rincones más preciosos del país. Ramona, su papá y su abuelo nacieron aquí, en Playuela en 1886. Faltaban 12 años para que el general Miles llegara a Guánica. Antes de que llegaran los gringos estaba la familia de Ramona aquí. ¿Me vas a decir que un gringo le cedió la tierra?”, expresó Salvemos a Playuela.

De acuerdo con la Ley de Muelles y Puertos de 1968, la zona marítimo-terrestre es un área pública que no puede ser adquirida, modificada u ocupada de forma privada. Sin embargo, las personas presentes denunciaron el interés de los Añeses, dueños del terreno, por precisamente querer vender el terreno tan pronto desahucien a la familia de Cruz Sanabria y desarrollar la zona de Playa India.

La ley, además, le da potestad al DRNA para hacer los desalojos, por eso se destaca el rol de la agencia y cómo maneja la situación.

Más protestas a favor de la familia de Ramona

 A partir del jueves, 9 de mayo, habrá un piquete en la Carretera 107, convocado por las mismas dos organizaciones que encabezan el esfuerzo. Desde las 8:30 de la mañana, consignas como “Playa India va pa fuera, Ramona aquí se queda”, “De aquí no nos vamos y a los buitres los sacamos” darán voz de defensa a la familia que reside hace dos mandos imperiales en la playa.

 

 

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