El arte como re-existencia: lo afropuertorriqueño

 

En Rojo

La cultura afrodescendiente en el Caribe es rica y diversa, y se ha expresado a través de una variedad de formas de arte, incluyendo la pintura. La historia del Caribe está estrechamente vinculada a la esclavitud y la trata de esclavos africanos, y los artistas afrodescendientes han utilizado la pintura para explorar su herencia africana y para desafiar las narrativas dominantes sobre la cultura afrodescendiente en la región.Pero una cosa es decirlo y otra es verlo.

Marielba Torres trabaja en eso, en visualizar. Es co-directora -junto a Marianne Ramírez, presidenta de la Alianza de Museos de Puerto Rico. A partir de la formación de Tiznando el país: visualidades y representaciones, se han iniciado investigaciones y actividades educativas que tienen como objetivo presentar las aportaciones de la población afrodescendiente en la cultura visual puertorriqueña. Puede partirse de la premisa de que la pintura ha sido utilizada como una forma de desafiar y subvertir las representaciones estereotipadas en el país. Los artistas han utilizado la pintura para crear imágenes que reflejan la belleza, la dignidad y la humanidad de las personas afrodescendientes, desafiando las narrativas negativas que han prevalecido en la cultura dominante en una sociedad fundada sobre el trabajo esclavo, pero -como muy bien afirma la doctora Torres- se constituyó paulatinamente en una población afrodescendiente libre y en resistencia, produciendo un capital cultural invisibilizado pero numeroso.

La exposición El arte como re-existencia: lo afropuertorriqueño, ocupa hoy el espacio del Museo de Historia, Antropología y Arte de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Rio Piedras. Torres trabajó junto a la directora, Flavia Marichal Lugo y su equipo, para lograr lograr someter una propuesta para la exhibición y otras acciones necesarias para el museo. Fueron largos meses de trabajo que incluye gestionar cada uno de los préstamos de las obras a coleccionistas a nivel privado y público. En algunos casos, como tres obras de Francisco Oller que están ahora a disposición del público, se creía que eran obras perdidas.

Tomado de la página de FB

En el recorrido por esta muestra, que va desde Campeche, a Oller, Tufiño, Daniel Lind, entre otros, se puede explorar la espiritualidad y sus conexiones con las prácticas religiosas afrocaribeñas, así como el retrato de mujeres y hombres afrodescendientes en situaciones cotidianas, como la preparación de la comida, la realización de tareas domésticas, o algún deportista en su momento de descanso.

La muestra también puede verse como una forma de explorar las luchas políticas y sociales en Puerto Rico.

A través de la representación y visualización que el proyecto propone y que ésta exposición nos permite podemos organizar la subversión de las representaciones estereotipadas y la exploración de las luchas políticas y sociales de los afrodescendientes desde la complejidad y la riqueza de la cultura.

Artículo anterior¿Es posible una paz duradera en Colombia?
Artículo siguienteOtra hipocresía de la Junta