La memoria postmoderna del artista Fabián Detrés

 

 

Especial para En Rojo

 

Ir al taller de Fabián Detrés, para aquellos foráneos al área, consta de un rito de peregrinación. Es necesario un artista con especial sentido de lucha, propiedad y tenacidad para poder establecer su taller y galería en su pueblo natal, Maricao, y mantener allí un tren constante de labor creativa. Sus puertas, en la calle Baldorioty #4, resguardan obras cargadas de la búsqueda introspectiva del recuerdo. Indaga con símbolos que, para el espectador cotidiano, pueden tomarse superficialmente, pero que hablan de una búsqueda de la memoria y la misma creación de esta dentro del artista.

Dentro de sus proyectos más recientes, la serie “Aleatorio” (2023) surge como una introspección a través de símbolos y recuerdos armados a través de la yuxtaposición de imágenes de cultura popular. Utiliza la solidez y uniformidad de su paleta de colores brillantes para rememorar tanto a la tradición de obra gráfica puertorriqueña como al pop-art. Son imágenes que comparten el espacio del lienzo en relación dialéctica, forzando el diálogo entre espacios, como instantes de pensamientos y memorias sueltas, que se hilvanan con el tiempo y la mirada. Detrés deja ver su imaginario, sus asimilaciones a través de imágenes. Presenta un cuestionamiento a las narrativas imperantes sobre los símbolos, recontextualizando así sus significados (en corriente postmoderna). Lo más notable es su reformulación de los símbolos del “viejo oeste”.

El recuerdo abarca diversos lugares y espacios temporales. Para Detrés, por ejemplo, contiene los tiempos de creación artística en Albacete, España, lugar donde vivió por un año. Esto fue posible gracias a becas recibidas del «Karrvaz Foundation» y «III Millenium Scholarships«. Además, en su recuerdo consta el llamado “exilio laboral”. En el 2017, el huracán María impactó a Puerto Rico. Como resultado de ello, Detrés se ve obligado a trasladarse a los Estados Unidos, donde trabajó en la industria petrolera de Texas, junto a sus hermanos. En este periodo, su creación artística entró en una laguna temporal. Su producción resultó nula. Se abre una pausa, un paréntesis. Sin embargo, al tiempo regresa a la isla, cargado del ejercicio que lo define: la memoria.

Fotos suministradas por el autor

Conociendo de primera mano la realidad de la diáspora y la emigración, esto le sirve de inspiración para sus próximos proyectos. En el 2020, realiza la serie “A shift/ C shift”, en homenaje a sus hermanos. En ella, La repetición de imágenes, en corriente del neo-pop art (término acuñado por Noi Sawaragi, denominando el resurgir modificado del “pop-art”), crea la interacción entre elementos, la búsqueda de esclarecimiento de lo similar dentro de diferentes facetas, así como para esclarecer el recuerdo. Y es que esta búsqueda es latente en la obra de Fabián Detrés. El ver un rostro y plasmarlo sin olvido, el recordar las formas y contornos de la naturaleza, el tratar de tener sentido de ello. Entre sus dibujos, hechos con mano rápida y excelente precisión, se destaca el uso del pastel carbón hecho a base de la flor de hibisco.

Actualmente se encuentra laborando varios proyectos. Se destaca su comienzo en la tradición de obra gráfica, con una serigrafía impresa al óleo, firmada y numerada. Es una tradición de la que tiene conocimiento de primera mano al haber estudiado en la Escuela de Artes Plásticas de Puerto Rico. Allí recibe su bachillerato en Artes Visuales con concentración en Pintura, donde recibió lecciones de, entre otros maestros en el arte puertorriqueño, José R. Alicea. Esta serigrafía consta de una apropiación, recontextualizada, de la familiar imagen de los cerillos “Three Stars”; la cual será presentada (y se encontrará disponible) el 16,17 y 18 de febrero, en su espacio de exhibición del Festival del Café, en Maricao. Una oportunidad ideal para conocer su obra, caracterizada por la profundidad introspectiva.

 

 

 

 

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