Por Cándida Cotto/claridades
Si bien las intenciones de la secretaria del Departamento de Educación (DE) Julia Keleher de que la organización privada Puerto Rico Education Foundation (PREF) le pagara un sueldo de $250 mil por sobre los $250 mil que ya le paga el pueblo de Puerto Rico causó escándalo y malestar entre el magisterio y el resto del país, mucho más llamó la atención la orden de arresto por desacato en su contra. La noticia de la orden de arresto inundó las redes sociales.
La secretaria del DE trató de justificar su pretensión de elevarse el sueldo diciendo que esto no le iba a costar nada al pueblo de Puerto Rico. Las intenciones de Keleher fueron detenidas por la Fortaleza luego de una consulta.
Para Emilio Nieves, presidente de UNETE, la pretensión de la secretaria es un “escándalo mayor”. Por su parte, la presidenta de la Asociación de Maestros Aida Díaz manifestó: “Me parece que con el solo hecho de haberlo solicitado cometió una violación ética. El solo haberlo solicitado denota que aquí no se respeta la separación de empresa privada y gobierno”. Mientras, el presidente de Educadores Puertorriqueños en Acción (EPA) Domingo Madera también rechazó las intenciones de la secretaria y las catalogó como “cuestionables y totalmente exageradas”.
Madera puso en duda la excusa que presentó la Secretaria ante la orden de arresto por desacato emitida en su contra el pasado miércoles por el juez García Gregory, del Tribunal de Estados Unidos en Puerto Rico (la llamada Corte Federal): “Según ella, no sabía que le habían pedido una información. ¿Cómo es posible que no conociera de la petición? Una excusa bastante débil la que ha dado la secretaria. Si inmediatamente sus abogados pudieron negociar con el tribunal, quiere decir que la información estaba allí”.
Hizo la observación de que cuando tribunal emite una orden de arresto o desacato es porque ha venido solicitando los documentos de manera constante; de la primera intención no emiten ese tipo de orden. Madera expresó que si la secretaria le exige a su personal un rendimiento de cuentas, ella también tiene que rendirlas. “Se trata además de nuestro sistema educativo. Cuando tenemos que darles cuentas a nuestros estudiantes y somos los primeros que fallamos, la cabeza es la que falla. Imagínate cuando tengamos que pedirles cuentas a los estudiantes. Ellos mismos van a decir: pero si la secretaria es la primera que falla. Yo creo que ahí la imagen de nuestro sistema se trastoca también”.
La Federación de Maestros (FM), por voz de su Vicepresidente Edwin Morales Laboy, declaró que aunque la noticia de la orden de arresto por desacato les tomó por sorpresa, indistintamente de que no haya habido envuelto un pliego acusatorio contra la secretaria –cosa que afirmó no les hubiese tomado por sorpresa–, sí hay que repudiar el que un funcionario de este nivel, sea cual sea, tenga que ser objeto de una orden de desacato por incumplir una orden del tribunal. Morales alertó de que la situación amerita que se reconsidere el puesto de Keleher y trajo a la atención que la Federación, desde hace tiempo, ha planteado que la secretaria ha demostrado estar incapacitada para administrar la agencia. Esta es objeto del rechazo y repudio de gran parte de la comunidad escolar, lo que refleja un problema mayor que se viene gestando dentro de la agencia hace tiempo. Además calificó de aberración las intenciones de la secretaria de que una empresa privada el pague su sueldo. Recordó que el puesto de secretaria o secretario del DE es uno constitucional, de haberse aceptado, hubiera sido un acto de corrupción.
En tanto, el presidente de UNETE también destacó el impacto que estos hechos tienen en el sistema educativo. “Estamos hablando de una funcionaria de un Departamento de Educación que tiene una responsabilidad social con el país. Estamos educando a todos los estudiantes a que respeten las normas y las reglas. Este incumplimiento con un requerimiento judicial representa un mal ejemplo al país”. Subrayó que la información se había solicitado en varias ocasiones y atribuyó a dos razones que un funcionario no dé la información que se le solicita: una, obstaculizar el proceso y dos, ocultar algo. Reparó que la situación podría arrojar información adicional debido a que antes de ser secretaria, Keleher estuvo vinculada al DE en la Oficina de Asuntos Federales.
Nieves igual puso en duda la excusa de la Secretaria de que no sabía de la solicitud y fue enfático en afirmar que cualquier requerimiento de los tribunales, ya sea Federal o de Puerto Rico, se le comunica de inmediato a la persona responsable de la agencia, incluso en casos menores.
