La poderosa brevedad de los cortos de ficción nominados para el Oscar

 

 

Especial para En Rojo

 

Un corto es un texto que irrumpe en una explosión de presencia, deja su marca y desaparece. Los cortos que prefiero son aquellos que son conscientes de su brevedad. La duración de una película no es una demostración de su poder, pero lo que un texto logra en cuarenta minutos o menos es reducir una experiencia a una abstracción visual y/o emocional. De esta manera, lo que reconocemos como natural se hace raro y lo releemos con una perspectiva única. Nuestras miradas se acomodan a la luz y, justo cuando comenzamos a adaptarnos, el corto concluye. En el corto puertorriqueño, Ojitos míos (dir. Otto Alejandro, EE. UU. y Puerto Rico, 2023; accesible en YouTube por “Ojitos míos 4 Train Films”), una joven (Ena Paulino) habla sobre sus vivencias en la Perla con su mamá. La cámara se enfoca en su boca, enfatizando un acento con bríos dominicanos y ecos de Washington Heights en Nueva York. Sin embargo, los ojos que la observan desde los murales de la Perla y el sonido del mar que se escucha en el fondo localizan la narración en tierra boricua. La joven encarna el espíritu de la isla que se repite, ese fascinante concepto de Antonio Benítez Rojo donde se siente la presencia de la mítica isla caribeña en cada esquina de nuestro planeta. Su lenguaje desafía fronteras culturales, políticas y geográficas para así encontrar su corazón en la Perla y sus ojos en el Ángel que se sienta a su lado en un banco. Los ojos de la joven no son tan solo de Ángel, sino también de todos aquellos que la reconocen en la Perla. La brevedad del corto asegura que cada espectador continúe construyendo diversos niveles de significado. La lectura perpetúa el proceso creativo. En los cortos de ficción (live action) nominados para el Oscar este año, un padre se derrumba, una madre busca una solución más allá de las limitaciones conservadoras del estado en el que reside, un viudo no encuentra la manera de abrir un féretro, un adolescente lucha por su libertad y Henry Sugar logra ver sin la necesidad de sus ojos.

En The After (dir. Misan Harriman, Reino Unido, 2023; accesible en Netflix), un padre (David Oyelowo) presencia el ataque terrorista donde muere su esposa e hija. El horror de ese momento cambia la dirección de su vida y la manera en la que se relaciona con todos a su alrededor. El poder del corto mayormente radica en la actuación de Oyelowo. Es obvio que el corto nos dejará ver cuando ese padre se destruye. Sin embargo, la explosión emocional es la sutileza con la que el personaje se levanta y continúa su camino.

En Red, White and Blue (dir. Nazrin Choudhuri, EE. UU., 2023; accesible para alquilar en VHX), una madre soltera (Brittany Snow) sobrevive cada mes con su sueldo de mesera. Por esto, la noticia de un embarazo la lleva a cruzar a otro estado en busca de un aborto. Ese viaje junto a su hija preadolescente le permite a la madre, que siempre está trabajando, reconectar con la joven. El corto tiene unos poderosos giros inesperados que reflejan la necesidad de tener accesibilidad al aborto. La película deja ver que la prohibición del aborto es otra agresión sobre el cuerpo de la mujer.

Knight of Fortune (dir. Lasse Lyskjær Noer, Dinamarca, 2023; accesible en YouTube) explora otra manera de confrontar la pérdida de un ser querido. Un hombre mayor debe abrir el féretro de su esposa muerta para verla por última vez. A solas con el féretro, el viudo se distrae tratando de cambiar una bombilla a punto de fundirse en la morgue. De esta manera, cada distracción lo aleja del momento tan difícil de enfrentar a su esposa muerta. Diferente al golpe emocional de After, Knight of Fortune enfatiza el humor de la situación y concluye en un sentido homenaje a esa persona que acaba de morir.

Invincible (dir. Vincent René-Lortie, Canadá, 2022; accesible en Vimeo) es basado en una historia verídica y cuenta las últimas horas de un adolescente de catorce años (Léokim Beaumier-Lépine) que está preso en una cárcel de menores. A pesar de que el joven tiene adultos a su alrededor que lo tratan de ayudar, su necesidad por la libertad lo lleva a cometer un acto de desesperación. La excelente actuación de Beaumier-Lépine devela el precio tan alto que estamos dispuestos a pagar por la libertad, independientemente de haberla perdido ante la ley.

The Wonderful Story of Henry Sugar (dir. Wes Anderson, EE. UU. y Reino Unido, 2023; accesible en Netflix) es otra joya de uno de mis directores favoritos ahora mismo. El corto tiene una estructura que se divide en varios niveles narrativos. Entramos en la historia con el cuento del mismo escritor, Roald Dahl (Ralph Fiennes), que narra cómo la vida de Henry Sugar (Benedict Cumberbatch), un hombre muy rico e interesado en el juego, cambió al descubrir el informe médico de Imdad Khan (Ben Kingsley), un artista de circo que podía ver con sus ojos vendados. El estilo tan particular de Anderson, su uso de colores y sus juegos narrativos hacen de este corto una maravilla visual. La obra es parte de una antología de cortos que Anderson dirigió para Netflix y que incluye The Swan, The Rat Catcher y Poison. Todas son altamente recomendadas.

Estoy feliz que The Wonderful Story of Henry Sugar se llevara el Oscar por mejor corto de ficción. Aunque la competencia me parece absurda, sentí mucho que Invincible no se llevara el reconocimiento. Este corto refleja la fuerza de la brevedad de una experiencia no tan solo por la duración de la película, sino también por la vivencia del protagonista.

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