CLARIDAD
La desinformación, la manipulación y la tergiversación de la verdad que vive el pueblo de Cuba y otros muchos pueblos agredidos fueron los temas de discusión en la conferencia Nueva Operación Verdad de Cuba para el Mundo, celebrada en La Habana, Cuba del 21 al 23 del mes de enero.
Convocada por la Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina (PL), al cumplir sus 65 años de fundación, la Nueva Operación Verdad es tan indispensable como la conferencia internacional Operación Verdad convocada en el 1959 por el dirigente cubano Fidel Castro Ruz para dar a conocer al mundo la realidad de Cuba y la determinación del pueblo cubano de construir su propio destino.
Desde esa perspectiva, la Nueva Operación Verdad de Cuba para el Mundo abordó el alcance de los medios de comunicación que van más allá de la prensa escrita desde todas las plataformas de la red cibernética; es decir, Internet, la televisión a distancia, la industria del llamado entretenimiento y la llamada inteligencia artificial, medios que parecen estar al alcance de todos, pero que no garantizan el acceso a la verdad ni a una información correcta. Se destacó que, por el contrario, hoy, más que nunca, los consumidores de los medios estamos más sujetos a la desinformación y a la manipulación de los medios de comunicación que responden a los intereses capitalistas e imperialistas.
Los trabajos de la conferencia iniciaron con un mensaje de bienvenida del presidente de la República de Cuba y primer secretario del Partido Comunista de Cuba, Miguel Díaz Canel, quien describió que esta nueva Operación Verdad es un evento importante y significativo; primero, debido a que la Operación Verdad del 59 representa un episodio realmente importante de la Revolución Cubana; segundo, al hecho de que la convocatoria la haya hecho la Agencia Latinoamericana Prensa Latina, que nació de esa primera campaña, y, tercero, “Porque la Revolución Cubana lleva 65 años de Operación Verdad. Eso lo saben ustedes mejor que yo. Dondequiera que exista hoy un instrumento de comunicación alternativo para combatir la mentira, la manipulación, la hegemonía y espejismos hacia nuestros bravos pueblos que se resisten con coraje, dondequiera que existan proyectos alternativos que le hagan frente al pensamiento único, ¡imperialismo!, hay una Operación Verdad en marcha”.
El presidente Díaz Canel dio las gracias porque en esas trincheras siempre, de manera invariable, se escuche la voz de Cuba, se combata contra los genocidios y contra la inclusión de Cuba en la arbitraria, mentirosa y manipulada lista de estados que patrocinan el terrorismo. Esto último, puntualizó, es uno de los nuevos instrumentos que utiliza el imperialismo estadounidense para atacar a Cuba. Señaló que ante el recrudecimiento del bloqueo, hoy Cuba está obligada a intensificar la Operación Verdad. Con igual ahínco reconoció la labor de los periodistas afincados en Palestina, los cuales han defendido la verdad con sus vidas, lo que ha permitido que el mundo reconozca la verdad del genocidio del pueblo palestino desde hace 75 años.
Operación Verdad
Tras el mensaje del presidente Díaz Canel, se presentó un breve documental sobre la primera Operación Verdad. René González Barrios, director del Centro Fidel Castro Ruz, discutió el documental y dio varios ejemplos del comportamiento de la prensa internacional en el país ante los crímenes cometidos por las dictaduras.
“En los inicios de la década del 30, el general Gerardo Machado anegó en sangre inocente a la isla. No hubo reacción en cadena de la prensa estadounidense; solo había algunos destellos cuando alguna de las víctimas del atropello se tomaba la justicia en sus manos. Lo cierto es que una Cuba subyugada por la enmienda Platt estadounidense, embajadores y asesores militares cualquier crimen contra el pueblo ejecutado por gobiernos afines al imperialismo era silenciado. Los representantes de los medios no tenían ojos para ver los crímenes de la dictadura”.
El director del Centro Fidel Castro Ruz señaló que era tanta la afrenta cometida por los medios de comunicación, que en su campaña de 1964, el mismo John F. Kennedy se refirió a Batista y reconoció que quizás el “más desastrosos de nuestros errores fue la decisión de sembrar y darle respaldo a una de las dictaduras más sangrientas y genocidas de la historia latinoamericana”.
La dictadura de Fulgencio Batista, anotó González Barrios, asesinó a más de 20 mil cubanos en siete años, una proporción de Cuba mayor que los norteamericanos muertos en las dos guerras mundiales. “Ante semejantes crímenes, se imponía la justicia”, expresó.
Un retroceso intelectual
Abel Prieto, presidente de la institución cultural Casa Las Américas, expuso Enfrentar las fake news, una mirada desde la cultura. Entre sus señalamientos destacó el desempeño de la prensa, en la que ha habido un retroceso intelectual del pensamiento crítico, y presentó el ejemplo del uso de las palabras: “Es un momento peligroso para las ideas. Nos están robando las palabras. La palabra libertad no es de Milei. Un fascista no puede hablar de libertad, es contranatura. El fascismo tiene muchos disfraces, y puede haber muchos fascistas disfrazados de demócratas”, dijo en alusión al uso del concepto de libertad por el presidente de Argentina y otros mandatarios.
El director de Casa las Américas exhortó a los directores de medios alternativos y a los periodistas presentes a articular, a actuar en conjunto, a compartir opiniones y a desmentir las calumnias tanto sobre Cuba como de otros pueblos agredidos: “Hay que combatir la colonización cultural que a veces va con nosotros y no nos hace visibles”.
Alcanzar una nueva ofensiva
Una de las exposiciones que enmarcó la discusión de la conferencia fue la ofrecida por el presidente del Sistema Público de Radiodifusión del Estado Mexicano, Genaro Villamil, quien destacó que a 65 años de Operación Verdad, nunca como ahora es necesario relanzar una nueva ofensiva. El desafío a las mentiras que lanzan los medios de comunicación que sirven al imperialismo, a los intereses del capital, a las organizaciones militares y culturales, a su juicio, ha dado un salto cualitativo y cuantitativo que tiene que ver con la data, el algoritmo, la inteligencia artificial (la que considera es en realidad un plagio), y con la industria del entretenimiento.
Muy consciente de este salto cualitativo, el director del Sistema Público de Radiodifusión de México, hizo énfasis en que para esa nueva Operación Verdad, no solo se requieren periodistas, sino que se necesitan actores, actrices, creativos, guionistas, ingenieros de la informática y “necesitamos jóvenes, incorporar a esta especie de operación verdad una especie de guerrilla informática en la tele, en los algoritmos en Facebook, en Tick Tock en todas las plataformas, porque, si no, vamos a perder la batalla, o la estamos perdiendo, si nada más pensamos que la autoridad moral que tenemos nos va a hacer superiores”.
Villamil se refirió a las mentiras que lanzan los medios de comunicación y las plataformas como una “hipertermia de noticias falsas”, y atribuyó eso a lo que está guiando a la nueva derecha internacional. “Hay fiebre en la nueva derecha internacional, que aprendió que solo podía llegar al poder a través de la mentira, del espectáculo de la venganza y del algoritmo”.
El hecho de que ya hay dos generaciones que han crecido en la era digital, que no quieren ver televisión y que programan sus propios gustos, lo atribuyó a que algo que se difunde en las redes tiene más credibilidad que lo que diga un científico o las instituciones académicas públicas o privadas. Esto no es simplemente un fenómeno informático, sino que es político. Es decir, que la capacidad de las nuevas tecnologías de segmentar los públicos por género, país, gustos, creencias y secretos, que los mismos usuarios divulgan en las redes, hace posible ese fin político.
