Juan Dalmau redobla esfuerzo para sacar al presidente de la CEE

 

Por Redacción de CLARIDAD

El candidato a la gobernación por el Partido Independentista Puertorriqueño (PIP), Juan Dalmau radicó una querella ante el Tribunal Supremo de Puerto Rico solicitando la destitución del presidente de la Comisión Estatal de Elecciones (CEE), Juan Ernesto Dávila, por la negligencia manifiesta del funcionario en el cumplimiento de sus deberes.

La querella de Dalmau se refiere específicamente al fracaso de Dávila de completar exitosamente el proceso de primarias pautado para el pasado 9 de agosto, que culminó con la intervención del Tribunal Supremo para garantizar su efectiva realización. En la querella, Dalmau sostiene que la negligencia e incompetencia del presidente de la CEE han trastocado la agenda del presente ciclo electoral, colocando en riesgo la efectiva realización de las elecciones generales del próximo mes de noviembre.

El nombramiento de Dávila a la CEE ha sido objeto de polémica por tratarse de un novato en materia electoral, un neófito inexperto- pero leal al gobernante Partido Nuevo Progresista (PNP)- colocado a cargo del principal organismo electoral del país. Dávila ha sido criticado también por su renuencia a reunirse y consultar con los representantes electorales de los partidos, y otros expertos en materia electoral. Tampoco se ha disculpado ante el país por el fracaso de su gestión ante la primera prueba de su mandato, las fallidas primarias del 9 de agosto.

El Tribunal Supremo tiene ante sí al menos cuatro querellas sobre el desempeño de Dávila. Urge que el  alto tribunal examine y resuelva sobre las mismas, ya que apenas faltan unos dos meses para las elecciones generales. Antes de ser nombrado presidente de la CEE, Dávila fungía como secretario del Tribunal Supremo, donde también se había desempeñado como oficial jurídico.

La colectividad y el candidato independentistas han liderado los esfuerzos para la remoción de Dávila de la CEE y su sustitución por alguien que tenga la competencia y el liderazgo necesarios para poder cumplir a tiempo con el complejo trabajo que se requiere para la realización efectiva de las elecciones generales.

 

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