En esto días, hubiese cumplido 80 años de juventud nuestro inolvidable amigo y compañero, José Rafael (Pucho) Charrón. Seguramente, andaría bromeando sobre su llegada a los 80, y su celebración por partida doble. Su mamá decía que nació el 1 de octubre de 1943. Pero su papá decía, que el 30 de septiembre. Y típico de Pucho, el zanjaba el diferendo con dos días de celebración para que todo el mundo quedara contento. Sobre todo, el más contento era él.
Así era, y fue para todo en la vida, ese ser tan especial. Siempre tranquilo y en eterna disposición de enfrentar cabalmente todo lo bueno, y lo no tan bueno, que se le presentara. En lo político, cumplió hasta el final. Y con CLARIDAD también. Se sentía dueño de nuestro archivo fotográfico, y en buena medida le pertenecía, no solo porque sus mejores fotos quedaron entre nosotros para la historia, sino porque pocos como él han sido tan apreciativos y cuidadosos con los trabajos de sus compañeros y compañeras fotoperiodistas de CLARIDAD. Para Pucho, nuestro archivo era una joya, sobre todo porque contiene la memoria gráfica de épocas y acontecimientos que desafían la historia oficial.
El hizo de CLARIDAD su taller de militancia, su espacio de revivir la solidaridad aprendida y vivida en décadas de lucha por nuestra independencia nacional y un país mejor y más equitativo para todos y todas en Puerto Rico. Su partida inesperada en un momento feroz de la pandemia del Covid-19, nos dejó aturdidos, y con muchas palabras por decirle y muchas gracias por darle.
Intuimos que él lo sabe, y por eso su huella y ejemplo se mantienen presentes entre nosotros, con la fortaleza de la vida misma. Los 80 de Pucho hubieran sido motivo para una gran fiesta en vida, y ahora son una nueva oportunidad para recordarlo y expresar lo importante que fue y sigue siendo para todos y todas en CLARIDAD.