No se puede cantar victoria con el COVID

 

CLARIDAD

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Los casos de contagio por el virus de COVID-19 han bajado, pero eso no significa que se pueda cantar victoria y bajar la guardia,  advirtió el doctor Marcos López Casillas.

En entrevista sobre el curso de la epidemia de COVID-19 en la isla, el director del Instituto de Investigaciones del Fideicomiso de Ciencias, Tecnología e Investigación de Puerto Rico (FCTI-PR), señaló que la observación de la comunidad científica es que se ha visto que ha bajado la positividad, al igual que las hospitalizaciones. Al momento de la entrevista, la positividad estaba en un aproximado de 10 % y las hospitalizaciones diarias, entre 72 a 75 en adultos. Los  fallecimientos también han bajado.

“Eso es bueno, pero puede significar dos cosas. Una que puede estar pasando es que a la gente le está dando covid, se está haciendo la prueba, pero no la está informando al Departamento de Salud. Creemos que eso es lo que está pasando. También puede ser que a la persona le esté dando covid y lo atribuya a otra cosa, porque hay síntomas que confligen  unos con otros, lo que es posible que se confundan. Eso ha pasado”. Agregó que también ha habido personas a quienes les ha dado el covid con infecciones, lo que representa otro problema, porque al confundir los síntomas se puede perder  la perspectiva de lo que puede ser covid y lo que puede no ser.

El doctor López Casillas apuntó a la tendencia de que a la gente le esté dando el virus, no se haga la prueba, pero sí sea covid, y crea que es otra cosa. También a que se haga la prueba y no lo reporte. Esto favorece que el virus continúe, ya que no tiene o no adopta ningún tipo de prevención. “Ese es  el principal problema que seguimos teniendo”.

A la luz del desarrollo que ha seguido el virus, confirmó que lo que se está viendo es que este permanece. Explica que  el virus ha mutado y sacado unas variantes que son bien diferentes a Ómicron; que incluso y ya salió una variante nueva que se llama BA2.86, que ha tenido 35 mutaciones completamente diferentes a Ómicron. Lamentó que como esa variante no progresó tanto, la Organización Mundial de la Salud (OMS) no le dio tanta importancia a ese hecho.

“Yo creo que si eso sucedió, en términos de lo que estamos viendo con Ómicron es posible que quizás pueda surgir otra variante nueva, como surgió en otro momento. Eso es posible porque la capacidad de mutación que tiene este virus ya está comprobada, ya está establecida. Entonces es importante que tengamos eso en cuenta, porque de que puede ocurrir, puede ocurrir”.

El investigador del Fideicomiso de Ciencias insistió en que ahora más que nunca lo importante que se tiene que hacer es que las personas se vacunen  porque es la primera vez en la cual se tiene una vacuna que puede  prevenir el contagio de Ómicron debido a que sale en el tiempo justo para hacerlo.

Según el investigador, cuando surgió el Ómicron y las otras variantes, se tenía un refuerzo que distaba mucho de esas variantes que estaban surgiendo porque el refuerzo para la variante Delta salió cuando ya esta se había ido. Ahora, dijo, se tiene un refuerzo para “Ómicron recombinante” la cual es muy similar a lo que genéticamente se tiene en estos momentos.

El  Ómicron recombinante es la variante que actual. Esta variante surgió hace un tiempo cuando se tuvo la  situación de que una variante de Ómicron y dos hijas  diferentes de esa variante infectaron a una persona a la vez y estas variantes  se recombinaron.  “Usualmente, cuando ocurren esas variantes, no  persisten, pero en este caso estamos viendo que no, por lo que todavía hay que prestarle atención para que no nos coja desapercibidos”.

El también profesor de Química en el recinto de Humacao, de la Universidad de Puerto Rico, recalcó que las personas deben vacunarse con la nueva vacuna  por varias razones. Primero, porque esta vacuna protege contra la variante Ómicron y tiene la definición de la parte recombinante. Explicó que un problema que se tiene con las vacunas es que siempre se trata de crear una vacuna que esté más cercana a la entidad que se está tratando de matar. La dificultad que se tiene es que  nunca se llega a eso porque los virus  mutan más rápido de lo que se puede crear una vacuna. En este caso, lo que ha pasado es que el virus ha mutado lentamente, no necesariamente ha mutado tan fuerte. Por lo tanto, la variante XCD1.5  no ha cambiado tanto y esa es la variante que en estos momentos la vacuna ya tiene en su definición. Como las variantes que tiene son bien pocas, esto da una ventaja grande para poder tener una vacuna lo más cercano posible al virus. El profesor López Casillas, reconoció  que es la primera vez que esto sucede  con el virus del covid.

El segundo aspecto que señaló es que como ahora se tienen tantos datos disponibles para esta vacuna, se demostró primero que la situación del covid prolongado es real y que prácticamente todos los órganos del cuerpo humano, si la persona tiene condiciones, se exacerban. Aclaró que en Puerto Rico no se han documentado casos, pero que en otros lugares sí se ha documentado que personas que han tenido la infección, eventualmente desarrollan covid  prolongado, que persiste por seis o cuatro meses.

Por el contrario, en las personas vacunadas esta condición es menor. En el caso de la miocarditis, defendió que los estudios relacionados con la vacuna han demostrado que la miocarditis asociada a la vacuna es cosa del pasado.

Otro aspecto que reclamó que ha quedado demostrado es que la vacunación previene hospitalizaciones, y que en los vacunados con las series completas previene las hospitalizaciones y las muertes, incluyendo a la población longeva.

El doctor López Casillas, confirmó que se puede decir que el virus llegó para quedarse y que hay que aprender a vivir con él, como se hace con la influenza, el dengue y otras enfermedades. Reparó en que  el cambio climático está exacerbando el ambiente y los virus, por lo que hay que estar pendientes a lo que está pasando, para adoptar medidas preventivas. “A nivel mundial no se puede bajar la guardia con esto del COVID-19 y otras enfermedades infecciosas. La pandemia mató millones de personas y todavía sigue matando personas”.

Al exhortar a que hay que crear medidas de salud pública, aunque sean mínimas, para estar vigilantes a lo que está pasando, puso como ejemplo que Puerto Rico tiene un programa de control de vectores para dengue. Ese programa, que lo tiene el Fideicomiso, ahora tienen una colaboración con el Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés) y el Departamento de Salud de Puerto Rico, el cual  ha tenido una acogida porque con este se sabe de primera mano en dónde surgen los casos de dengue. Insistió en que hay que estar vigilantes de otras enfermedades y proactivos de ahora en adelante en cómo se va a hacer epidemiología de estas enfermedades.

 

 

 

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